Balears y Navarra son las comunidades autónomas en las que más está bajando la morosidad entre vecinos, según destaca el presidente del Colegio de Administradores de Fincas de las islas, Pau Bonet. En concreto, la deuda en el seno de las comunidades de propietarios se sitúa en los 52 millones de euros, frente a los cerca de 54 millones que se daban un año atrás, lo que implica un descenso de alrededor de un 3,5%. Como uno de los factores clave que explica esta evolución positiva está la reactivación del empleo y el consiguiente aumento de los ingresos familiares.
Un dato especialmente destacado desde este colectivo profesional es que de estos 52 millones de euros adeudados al cierre del año pasado, 9,6 millones corresponden a impagos de los bancos, una cifra que 12 meses atrás se situaba en los 11 millones. Bonet no dudo en calificar de "vergonzoso" que las entidades financieras, que en buena medida son propietarios de inmuebles tras haber desahuciado a sus inquilinos por no pagar la hipoteca, ahora den problemas a la hora de cubrir los gastos de las comunidades de propietarios.
Según el presidente de los administradores de fincas, lo que los bancos deberían hacer es "domiciliar los pagos como hacen el resto de vecinos, y no tener que entregarles documentación por triplicado", ya que para empezar eso está encareciendo los costes administrativos al colectivo que Bonet representa.
Otro aspecto subrayado es el descenso que se ha dado en los impagados protagonizados por los promotores inmobiliarios (correspondientes a las viviendas de una finca que no han conseguido vender), que apenas supone ya entre un 4% o un 5% del total de la citada deuda, pero en este aspecto Pau Bonet recuerda que muchos de estos inmuebles han pasado a ser propiedad de las entidades financieras.
Por otro lado, el presidente de los administradores de fincas destaca que alrededor de un 20% de los impagos corresponden a aquellos vecinos a los que se define como 'morosos profesionales', es decir, que siempre abonan sus deudas con retraso no por falta de fondos, sino porque prefieren destinar ese dinero a otros fines y solo saldan sus facturas cuando se les amenaza con llevarlos a los Tribunales.
Porque en el resto de casos, Pau Bonet reconoce que los impagos están provocados por los problemas financieros de muchas familias que no han logrado alcanzar un nivel de ingresos suficiente para hacer frente a todos sus gastos.
En este sentido, el presidente de los administradores de fincas señala que muchos de estos vecinos, más que liquidar la totalidad de la deuda acumulada, lo que están haciendo es empezar a pagar las cuotas atrasadas para evitar que el importe siga creciendo, pero sin saldar los impagos en su totalidad, lo que explica que el nivel de morosidad se esté reduciendo a un ritmo relativamente lento.
Un punto lamentado por Pau Bonet es que todavía se detectan deficiencias en el mantenimiento de los edificios, más allá de las reparaciones en los ascensores o en la adopción de medidas contraincendios, dado que muchos vecinos siguen siendo reacios a afrontar según que costes sin tener en cuenta que se trata de una inversión.
Alquiler turístico
El presidente de los administradores de fincas señala que el nivel de tensiones que el alquiler turístico está generando en el seno de las comunidades de vecinos de las islas es relativamente bajo, pero pronostica que se va a incrementar a causa de la regulación que pretende aplicar el Govern balear.
En concreto, indica que el hecho de condicionar que un propietario de plurifamiliar pueda alquilar su vivienda a turistas a la autorización de la comunidad de propietarios derivará de conflictos ante los Tribunales en el caso de que se deniegue, que en su opinión terminará ganando el propietario del inmueble y que conllevará para los vecinos de la finca el tener que afrontar por su derrota unas costas judiciales y unos gastos de abogados que sumarán de 7.000 a 8.000 euros. En su opinión, "una comunidad no puede decidir sobre el uso de una propiedad privada", algo que prevé que los jueces irán respaldando.
