Sonia Vidal Ferrer fue escogida ayer por los jueces unipersonales de Palma nueva decana, en sustitución de Francisco Martínez Espinosa, que ha ocupado ese cargo en los últimos doce años. Vidal fue votada por unanimidad.

Las votaciones tuvieron lugar en una junta de jueces celebrada de manera simultánea en las sedes de Vía Alemania y sa Gerreria. De los 59 magistrados con derecho a voto participaron en la elección 40, que dieron su apoyo unánimemente a Vidal. Algunos jueces no acudieron a votar por estar de baja o permiso.

La nueva decana es mallorquina e ingresó en la carrera judicial en marzo de 1988. Vidal ha estado destinada en Inca -donde también fue decana-, un juzgado de menores de Barcelona y Palma. En los últimos 12 años ha sido magistrada en un juzgado de primera instancia de Palma.

Sonia Vidal agradeció ayer a sus compañeros el apoyo dado y recibió las felicitaciones de numerosos magistrados, entre ellos Martínez Espinosa, que pasará a ocupar su plaza en el juzgado de vigilancia penitenciaria de Palma.

La recién elegida adelantó que no piensa diferir mucho en su gestión de la efectuada por su predecesor. Vidal tomará posesión al día siguiente de que su nombramiento aparezca en el BOE.

El decano judicial representa en cierta medida a sus compañeros, de los que suele actuar como portavoz. Es el responsable de que las instalaciones, oficinas e infraestructuras de las sedes judiciales de la ciudad funcionen y sean dignas para sus cometidos, aunque los medios materiales y el personal de los juzgados dependen del ministerio de Justicia.

Es decir el decano debe velar por el buen funcionamiento de la Administración de Justicia, pero no tiene competencias para intervenir en los medios materiales o dotación de edificios.

Vidal también etará al frente de las oficinas del decanato y de servicios comunes que dependen de aquel. La nueva decana también será miembro nato de la sala de gobierno del Tribunal Superior de Justicia, el órgano de gobierno interno de los juzgados y tribunales de las islas.