La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) pide que los 76 controladores aéreos que serán juzgados en Palma por el caos generado en los aeropuertos de Balears en diciembre de 2010 sean condenados a penas de multa que suman 8,2 millones.

La patronal hotelera ha presentado escrito de acusación ante el juzgado de instrucción 1 de Palma en el que considera a 76 de los controladores imputados responsables de un delito de abandono colectivo de un servicio público.

La FEHM, personada en calidad de acusación particular, solicita una pena de multa de 12 meses con una cuota diaria de 300 euros para 70 de los acusados, mientras que para los 6 que eran en el momento de los hechos delegados del sindicato USCA reclama la misma pena de multa y la suspensión de empleo o cargo público por dos años. Cada una de las multas solicitadas por la organización empresarial suma 108.000 euros, por lo que el importe total asciende a 8.208.000 euros.

La presidenta de la FEHM, Inmaculada Benito, ha defendido que con su acusación la entidad persigue "una resolución ejemplar" que compense por "el daño reputacional a España en su conjunto y especialmente a Balears" ocasionado por la paralización de la actividad aérea en todo el país.