Ruth Mateu, hasta hoy consellera de Transparencia, Cultura y Deportes, ha afirmado que dimite por propia decisión para "dar ejemplo" como máxima responsable de Transparencia del Govern.

Rodeada de gran parte de su equipo (los ausentes no han tenido tiempo de llegar o estaban de viaje) y visiblemente afectada, Mateu ha sostenido que ella no ha cometido "ninguna irregularidad", pero que le corresponde asumir la "responsabilidad política" por el cargo que ocupa ante los contratos de conselleries en manos de Més, entre ellas la suya, al que fuera jefe de campaña del partido, Jaume Garau, algo que ha considerado que es "poco ético".

Tras considerar que con su dimisión se han asumido las responsabilidades políticas adecuadas, ha dejado en el aire la posibilidad de una remodelación más amplia en el Govern, al igual que una hora antes ha dicho la presidenta Francina Armengol al responder con un "tengo que reflexionar" respecto a más cambios en su Gabinete tras la ocurrido. Por el momento, esta tarde Més per Menorca (partido al que en el reparto de consellerias del Pacto lecorresponde Transparencia) celebrará una asamblea en la que decidirá si deben dimitir directores generales de Mateu.

Junto a ello, la ya exconsellera ha afirmado que "ningún miembro del partido ha recibido instrucciones sobre las personas que se debían contratar", a la vez que ha lamentado que "se utilice" lo ocurrido para "dañar" a Més.