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Arquitectura

Casas de paja que lo aguantan todo

Las viviendas hechas con rastrojos secos no son un capricho hippie, sino eficiencia: la calefacción se vuelve innecesaria

En el cuento de los tres cerditos, el más vago de los hermanos porcinos se queda sin casa porque el lobo se la derriba de un soplido. Quizás por esta imagen, la idea de una casa construida con balas de paja hace pensar en algo endeble.

"En Mallorca hay un ejemplo de casa construida con balas de paja y en diez años ningún lobo ha podido tirarla", bromea Carles Forner, arquitecto del departamento de Desarrollo Local del Consell y uno de los veinte profesionales asistentes al curso sobre esta técnica de bioconstrucción impulsado desde el órgano insular y que se ha celebrado esta semana en la UIB.

En Europa, la primera casa de paja se construyó en 1921 en Francia. Y ahí sigue, casi un siglo después. Los muros se hacen de paja y luego se cubren con otro material, como madera: el aspecto es el de una casa normal y corriente.

Tanto Forner como Rafael Sala, arquitecto especializado, desmontan una a una todos las ideas preconcebidas sobre los posibles inconvenientes de este material: es resistente; aísla del ruido; permite una estanqueidad total; no huele; no prende (al estar muy compactada y no dejar espacio para el aire); no atrae a roedores ni a insectos; no genera humedad (todo lo contrario, aseguran: es un material excelente para mantener a raya la humedad, lo que la convierte en un elemento ideal para un sitio como Balears) y no es un "capricho hippie", sino pura eficiencia y ahorro.

'Casas pasivas'

"Es muy barato y muy buen aislante", subraya Forner, lo que ayuda a levantar 'casas pasivas': viviendas que se construyen tratando de lograr un confort térmico sin necesidad de sistemas de calefacción o refrigeración (son casas frecuentes en los países europeos más fríos, pero desconocidas en España).

Una opción es usar revestimiento de arcilla, con lo que se aplica la misma y sencilla (pero eficiente) tecnología "del botijo", que mantiene fresquito el líquido dentro aunque fuera la canícula no perdone.

Veinte grados perpetuos

"Las familias que viven en algunas de las casas que he construido están encantadas, usan la calefacción una semana al año como mucho", asegura Sala, uno de los pocos arquitectos de la isla experto en este tipo de construcción, "se mantienen a 20 grados de manera natural".

Él ya ha edificado cuatro viviendas así y tiene otras cuatro en proyección. Subraya la ventaja principal de este material: su sostenibilidad. Es un elemento de kilómetro cero y que no deja huella ecológica: reduce de forma drástica los residuos en todas las fases de un edificio, desde su inicio hasta su desaparición (al demoler una casa hecha de paja, ésta vuelve a la naturaleza sin contaminar).

Producto local

El arquitecto del Consell añade otra ventaja: dar salida a un producto abundante en Mallorca, algo que podría beneficiar a los payeses: "Al recoger el cereal se separa el grano, para aprovecharlo, de la paja: de esta manera podemos aprovecharlo todo", indica Forner.

¿No hay inconvenientes? "Que de momento hay poca gente que conozca la técnica adecuada".

De ahí que se imparta este curso, para el que han venido dos expertos en este tipo de construcción: Luc Floissac, consultor ambiental, e Isabelle Melchior, arquitecta. La formación se enfoca principalmente a arquitectos de la administración pública aunque también podían acudir profesionales independientes.

En esta casa hechas con balas de paja la chimenea está casi de decoración. R. SALA

Aunque a nivel mundial ya hay grandes empresas que se están animando a apostar por esta técnica para levantar sus sedes, en España el Consell es una de las primeras administraciones que se ha atrevido a utilizar la bioconstrucción con paja para erigir un edificio público: el futuro parque de bomberos de Santanyí.

En el campus, y en el marco de la estrategia SMART UIB que dirige Tomeu Serra, la vivienda en ruinas de Ca ses Llucies (una casa mallorquina típica) se rehabilitará apostando por la bioconstrucción y la tecnología inteligente: será un modelo "replicable" que se usará como ejemplo para los estudiantes de las ingenierías y como 'campo de pruebas' para ensayar estas técnicas de construcción. El próximo septiembre, este 'piso piloto de la sostenibilidad' abrirá sus puertas.

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