La presidenta del Govern, Francina Armengol, cambió ayer de objetivo y viró ligeramente su punto de mira. La socialista quería debatir en el Parlament con Biel Company, pero se tuvo que conformar con sus habituales rifirrafes con la portavoz Margalida Prohens. Intentó por todos los medios llevar a la arena de la disputa al nuevo presidente del PP, pero Company no entró al trapo. La jefa del ejecutivo lo retó en varias ocasiones y promete hacerlo cada martes. Pero el nuevo líder popular siguió fiel a su palabra de renunciar a la portavocía en favor de Marga Prohens. ¿Cuánto tiempo aguantará Company sin inmutarse ante las embestidas de Armengol?

La jefa del Consolat despidió a Prohens la semana pasada, creyendo que tras el congreso sería relevada. Ayer, con su dialéctica habitual, intentó enmendar su profecía fallida. Company se cambió de escaño, ya que minutos antes del pleno del Parlament había sido nombrado presidente del grupo parlamentariohabía sido nombrado presidente del grupo parlamentario. Ocupó el primer sillón que corresponde a los diputados conservadores y Prohens corrió un escaño.

Esta imagen ayudó a la socialista a venirse arriba. Pese a que quien preguntaba era Prohens, Armengol se dirigió directamente a Company. Después darle la enhorabuena le espetó: "Es una pena que no quiera utilizar este espacio magnífico para hacer propuestas hacia los ciudadanos de Balears y ser la voz de su grupo parlamentario y le animo a que, cuando pasen un par de semanas y se vea con más fuerzas, al final asuma el liderazgo si realmente quieren hacer creíble un cambio en el PP".

Company, en los pasillos, mandó un mensaje a la presidenta: "Me veo con fuerzas suficientes para debatir con ella".

Rajoy llamó a Company

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, llamó el lunes al nuevo líder del PP balear, Biel Company, para felicitarle por la victoria en el congreso regional. "Biel, enhorabuena y que sepas que estoy al corriente de todo lo que ha ocurrido en Baleares", aseguró Rajoy a Company por teléfono. El presidente del PP nacional se refería al llamado "juego sucio" que ha protagonizado la campaña electoral para el congreso regional entre las candidatura de Company y la de José Ramón Bauzá y que los regionalistas culpan directamente al expresident de filtrar en medios digitales una sentencia por una condena de agresión de hace diez años.