La presencia en la popular fiesta que se celebra con motivo del descenso folclórico del río Nalón, en Asturias, le va a salir caro a un policía nacional destinado en la comisaría de Palma. Y esta participación, que supone arrastrar a peso la embarcación, le ha supuesto una sanción de un mes de empleo y sueldo, por cuanto acudió a esta celebración cuando se encontraba de baja médica, tras ser operado de una lesión en la espalda. Este agente, que ha acudido a los tribunales para intentar que le anulen la sanción, sufre desde hace años problemas médicos, que le llevaron al quirófano para ser operado de una lesión en la espalda. La intervención, que fue complicada, arrastró una larga recuperación, en la que estuvo de baja médica. Cuando teóricamente no estaba en condiciones físicas para trabajar, el policía participó en el denominado descenso folclórico del río Nalón, en la localidad de Pola de Laviana, en Asturias.

El funcionario fue sometido a una investigación del grupo de Asuntos Internos, que realizó un reportaje fotográfico en el que se veía al policía de baja participando en esta celebración popular, que tuvo lugar el pasado día 23 de agosto de 2014. El descenso, según señala una sentencia dictada por el TSJIB, consistía en un pasacalles, en el que se arrastran las embarcaciones que se van a utilizar en el descenso del río. La fiesta popular empieza sobre las tres de la tarde y transcurre entre música y jolgorio. Los participantes forman parte de una peña, que se disfrazan. El policía llevaba una indumentaria que hacía referencia a la película infantil "Toy Story". El agente participó primero en el pasacalles y más tarde en el descenso por el río Nalón. Para ello tuvo que tirar de la embarcación, junto a sus amigos, para poder llegar al final del trayecto. En las zonas de poco calado los participantes tienen que arrastrar a peso la embarcación.

Para justificar la sanción interna impuesta al funcionario, la Dirección General de la Policía se basó en el reportaje gráfico, que no dejaba lugar a la duda sobre la participación del policía en esta fiesta popular.

El agente, en su defensa, señaló que tenía la autorización del médico que le operó, pero los jueces, que confirman la gravedad de los hechos, ponen en duda esta afirmación. La sentencia recuerda que todo policía que está de baja tiene la obligación de conseguir cuanto antes la recuperación, evitando el riesgo.