Tienen 28 bases diseminadas por toda Europa, pero únicamente una de ellas opera solo en invierno. La estrenaron oficialmente ayer y está en Mallorca, claro: la isla del turismo récord se convierte en la primera base de vocación puramente turística de EasyJet, que ha elegido el aeropuerto de Son Sant Joan para poner a prueba una nueva estrategia de expansión. “Nos permitirá que nuestro modelo de negocio se adapte más a las necesidades de nuestros clientes y dé más opciones a nuestros empleados de tener otro estilo de vida”, glosaba el director para España de EasyJet, Javier Gándara, que dejaba claro que “de momento” solo se plantean explotar al máximo Mallorca durante “ocho meses de verano”.

Quinta compañía

Con lo que EasyJet, la quinta aerolínea del aeropuerto por volumen de pasajeros, no llega a la isla ni para desestacionalizar ni para mejorar las conexiones con la península, donde no tienen ni piensan tener rutas en los próximos años, confirmó Gándara. Su apuesta, dicen, son los enlaces con el resto de Europa. Concretamente, esta temporada dispondrán de 24 vuelos directos desde Mallorca, es decir, dos rutas más que el año pasado, cuando no volaban de Palma a Venecia y Burdeos. Ahora sí lo harán, aprovechando el potencial que las da la nueva base veraniega mallorquina.

En ella tendrán tres aviones y 120 trabajadores: 40 de ellos son pilotos y el resto, tripulantes de cabina. Ese despliegue les permitirá elevar de cara a los próximos meses su oferta de plazas en las rutas con la isla. “EasyJet va a crecer un 7% en toda la red, pero en Palma el aumento de este verano será mayor, del 18%”, detallaba el ejecutivo de EasyJet. De ese modo la aerolínea ofrecerá en las conexiones mallorquinas 2,2 millones de asientos, casi 400.000 más, incremento que lograrán con más frecuencias, aviones más grandes y las dos nuevas rutas citadas, confirmaba el primer ejecutivo de EasyJet en España.

A su lado aplaudía el director del aeropuerto, José Antonio Álvarez, que tras la presentación oficial de la base, bautismo de avión y canapé incluido, insistía en que cuando más crece la actividad del aeropuerto es fuera de los meses de verano. Aunque si se analizan al detalle las previsiones de AENA para este verano, cuando las aerolíneas ofrecerán en Mallorca la cifra récord de 28,8 millones de plazas de avión, la realidad es que solo en julio y agosto se superarán los 4 millones millones de pasajeros, mientras empiezan a masificarse también la primavera y el otoño: según los datos de AENA, en mayo, junio, septiembre e incluso octubre las aerolíneas ofrecerán en la isla más de 3 millones de plazas por mes, unas cifras que hasta hace cinco años únicamente se alcanzaban en julio y agosto. Así que la primavera y el otoño se acercan poco a poco a la saturación del verano.

El Govern no quiere más ‘verano’

Esa perspectiva llevó el miércoles al vicepresidente del Govern y conseller de Turismo, Biel Barceló, a asegurar que el crecimiento del aeropuerto en verano es “insostenible”. Tanto es así que ayer mismo anunciaba que el Govern balear va a reducir su presencia en ferias turísticas centradas en el calor de sol y playa, en la convicción de que las islas no pueden acoger ya más turistas en temporada alta.

No lo ven así en la empresa que explota el aeropuerto, AENA, representada en la isla por el director de Son Sant Joan, que enfatizaba tras la presentación de EasyJet que Son Sant Joan está preparado para elevar aún más el tráfico: “Tenemos aún capacidad disponible para gestionar más operaciones y dar respuesta a la demanda creciente de las aerolíneas. Mallorca es un destino prioritario para ellas”. Sobre todo en verano, como deja claro la última apuesta de EasyJet.