El nombre de Mallorca quedará vinculado para siempre al de ETA, que hoy ha anunciado que entregará las armas el próximo 8 de abril.

El 30 de julio de 2009 el grupo terrorista cometió en la isla su último atentado con víctimas mortales. Fue en la muy turística Palmanova (Calvià) y contra dos guardias civiles: Carlos Sáenz de Tejada y Diego Salvá, quienes se convirtieron los dos últimos asesinados en un atentado de ETA en España. Nueve meses después la banda terrorista mataría a un gendarme francés tras un tiroteo cuando intentaban robar en un concesionario de coches.

El atentado perpetrado con una bomba lapa en la comisaría de la Guardia Civil de Palmanova fue el último planificado por la organización terrorista, que en septiembre de 2010 anunció un "alto el fuego," convertido en en octubre de 2011 en un cese definitivo de la actividad armada que se ha mantenido hasta hoy.

Tras el atentado en una de la zonas de mayor afluencia turística, se activó la llamada 'Operación jaula', que bloqueo las entradas y salidas de la isla para intentar impedir que los terroristas escapasen. También se puso en marcha un gran operativo policial, con controles e investigaciones en numerosos municipios.

Intento de atentado contra el Rey

Este no fue el primer intento de atentado en de ETA en Mallorca. En el verano de 1995, la banda terrorista intentó atentar contra el entonces rey Juan Carlos I. Los terroristas llegaron a tener al monarca en el punto de mira de un fusil hasta en dos ocasiones cuando este se encontraba a bordo del 'Fortuna' en la base naval de Portopí.

Los etarras habían alquilado un piso desde cuya terraza podían ver el barco. No dispararon porque, según se dijo entonces, no tenían definido el plan de huída.