Más de la mitad de los contratos ofrecidos a mujeres durante el pasado año fueron para trabajar de camarera, limpiadora y dependienta. Estos tres empleos supusieron el 58,6% del total. Todo ello pese a que el 37,2% de las isleñas ha cursado estudios superiores y un 30,4% supera la segunda etapa de la educación secundaria, porcentajes ambos que son superiores a los que presentan los varones.

Estos datos explican que la sobrecualificación afecte mucho más a las trabajadoras que a los asalariados masculinos. La Fundación Impulsa desveló recientemente que el 50,7% de los isleños está ocupando puestos de trabajo no adecuados para su formación: en un 33,7% de los casos debido a que la formación del empleado era inferior a la que exigía la función que desempeñaba (infracualificación), y en un 17% porque el trabajador contaba con una titulación que superaba la requerida para desempeñar las labores encomendadas (sobrecualificación).

Esta sobrecualificación supone para las mujeres un problema más grave que para los hombres. Las trabajadoras que se forman para luego tener que desarrollar un empleo que no requería tantos conocimientos suponen el 21,8% del total, mientras que eso solo sucede con el 12,9% de los varones. Por el contrario, un 41,6% de los hombres cuenta con un trabajo para el que se necesita una cualificación superior a la suya, algo que solo pasa con el 24,5% de las mujeres.

Oferta de empleo

Los datos facilitados por el Observatorio del Trabajo de Balears desvelan que 44.107 contratos firmados por mujeres durante el pasado año fueron para desarrollar labores de camarera, con un incremento del 16,1% respecto a los suscritos en 2015. En segundo lugar aparecen las 37.425 contrataciones realizadas a mujeres para desarrollar funciones de limpiadoras de hoteles, oficinas y otros establecimientos, en este caso con una subida del 6,7% respecto al ejercicio anterior. El tercer grupo más numeroso fue el de las vendedoras en comercios, con 26.005 contratos y un aumento interanual del 11,5%.

A partir de ahí, las cifras registran un fuerte descenso. El cuarto grupo de trabajadoras más reclamado fue el de ayudantes de cocina, con 8.389 contrataciones y un incremento del 18,4%, seguido del de personal administrativo con funciones de atención al público, con 8.228 contratos y un aumento del 14,2%. El sexto puesto es el de monitores de actividades recreativas, con 7.169 contratos y un alza del 24,4%, seguido de empleadas de agencias de viajes, con 7.024 contratos, aunque aquí con un descenso del 10,3%.