La polémica por la contratación de periodistas para los informativos de la radio y televisión pública IB3 por parte de la nueva concesionaria, Mediapro, llegó ayer al Parlament. La diputada de El Pi, María Antònia Sureda, denunció un "posible fraude" en estas contrataciones y exigió a la consellera de Transparencia, Ruth Mateu, que tome cartas en el asunto. Sureda leyó varias cartas de profesionales que, siguiendo los criterios exigidos -nivel de catalán, titulación y experiencia-, fueron excluidos de las pruebas. Reveló que en esta situación hay unas 20 personas.

Ruth Mateu negó la existencia de ningún fraude y añadió que el proceso "está siendo mucho más limpio que en épocas anteriores donde la elección se hacia a dedo". Mateu recordó que se trata de una empresa privada que tiene una concesión pública y que el Govern se ha encargado de verificar que se siguen los criterios establecidos en el proceso de selección. IB3 debe contratar unas 40 personas más para informativos.