La Comisión Europea ha abierto una investigación sobre acuerdos para la contratación 'online' de servicios hoteleros entre los principales operadores turísticos europeos y la cadena mallorquina Meliá Hotels Internacional, al considerar que podrían contener cláusulas que discriminan a clientes por su nacionalidad o país de residencia en la fijación de precios.

El Ejecutivo comunitario ha iniciado esta investigación a raíz de las denuncias presentadas por los clientes y está relacionada con los acuerdos concluidos en materia de contratación en línea entre Kuoni, REWE, Thomas Cook y TUI y la cadena hotelera.

Bruselas ha asegurado en un comunicado que "acoge favorablemente" la iniciativa de los hoteles "para desarrollar e introducir mecanismos innovadores de fijación de precios que maximicen la ocupación de las habitaciones", pero advierte de que "ni los hoteles ni los operadores turísticos pueden discriminar a los clientes en función de su ubicación".

En opinión de la Comisión Europea, estos acuerdos podrían contener cláusulas que discriminan a clientes "en razón de su nacionalidad o su país de residencia", puesto que les impide "ver la disponibilidad real del hotel o reservar habitaciones a los mejores precios".

Esta situación, defiende Bruselas, podría vulnerar las normas de competencia europeas "al impedir que los consumidores reserven plazas hoteleras en las mejores condiciones ofertadas por los operadores turísticos en otros Estados miembros" debido "simplemente" a su nacionalidad o localidad de residencia.TRES INVESTIGACIONES SOBRE 'E-COMMERCE'

TRES INVESTIGACIONES SOBRE 'E-COMMERCE'Junto con la investigación sobre Meliá y los operadores turísticos, la Comisión Europea ha anunciado otros dos expedientes relacionados también con la posible existencia de "barreras" al comercio electrónico. En concreto, el objetivo de Bruselas es abordar los "problemas específicos de la restricción de los precios de venta al público, la discriminación por motivos de ubicación y el bloqueo geográfico.

La comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, ha detallado que las investigaciones examinan "si las empresas están contraviniendo las normas de competencia de la UE al aplicar una restricción desleal de los precios de venta al público al excluir a los consumidores de algunas ofertas a causa de su nacionalidad o ubicación".

Así, el Ejecutivo comunitario investiga a Asus, Denon & Maranz, Philips y Pioneer por restringir la capacidad de los vendedores 'online' a la hora de fijar sus propios precios para productos electrónicos de consumo de uso muy corriente como electrodomésticos, ordenadores portátiles y productos de alta fidelidad.

En este sentido, Bruselas opina que el efecto de estas restricciones podría "agravarse" por la utilización de un software de fijación de precios que adapta automáticamente los precios de venta a los de los principales competidores.

También ha abierto una investigación sobre los acuerdos bilaterales celebrados entre Valve Corporation, propietaria de la plataforma de distribución de juegos Steam, y cinco desarrolladoras de videojuegos (Bandai Namco, Capcom, Focus Home, Koch Media y ZeniMax).

En concreto, el expediente se centra en las prácticas de bloque geográfico mediante las cuales las empresas impiden a los consumidores comprar videojuegos en razón de la ubicación o el país de residencia de los consumidores.

En cualquier caso, la Comisión Europea ha afirmado que la apertura de los tres expedientes no prejuzga el resultado final de la investigación, así como que no existe ningún plazo legal para concluirlas, pues su duración "depende de toda una serie de factores" como "la complejidad del caso, la cooperación de las empresas y el ejercicio de derechos de defensa.

LA HOTELERA CONFÍA EN EL INFORME

Por su parte, Meliá Hotels International confía en que el procedimiento abierto por la CE a la hotelera y a operadores turísticos por supuestos acuerdos en servicios de alojamiento discriminatorios para el consumidor "confirme la ausencia de conductas contrarias a los derechos de los consumidores europeos".

Después de que la CE haya informado a Meliá del inicio de una investigación respecto de determinados acuerdos relativos a reservas hoteleras formalizadas a través de canales de comercialización electrónica, la cadena ha señalado en un comunicado que el procedimiento afecta a operadores del sector hotelero y a otras actividades completamente diferentes como fabricantes de electrónica de consumo y vídeojuegos.

Meliá indica que la investigación de la CE "no supone que efectivamente exista infracción alguna" y que el proceso se ha abierto "a efectos de ampliar su conocimiento sobre la cuestión planteada·.

La hotelera ha informado de que seguirá participando de manera activa y constructiva con la CE como lo ha venido haciendo hasta la fecha, "aportando cuantas aclaraciones pudieran ser necesarias respecto de la cuestión planteada, confiando en una resolución rápida del procedimiento, que confirme la ausencia de conductas contrarias a los derechos de los consumidores europeos".