Casi uno de cada tres turistas llegados a Mallorca durante el pasado año se alojó fuera de los establecimientos hoteleros, y optó principalmente por viviendas de alquiler o de "familiares o amigos", según los datos facilitados ayer por los institutos de estadística nacional y balear (INE e Ibestat). En concreto, la isla acogió durante 2016 a 10,9 millones de visitantes, de los que 7,3 millones fueron atendidos en la planta hotelera y más de 3,3 millones en viviendas particulares, quedando 249.183 en otras instalaciones.
Los datos facilitados ayer sobre los movimientos turísticos en frontera (Frontur) desvelan no solo la importancia que el turismo vinculado a residencias particulares ha adquirido en Mallorca (y en el conjunto de Balears, como se verá más adelante), sino su peso fundamental durante la temporada baja, cuando la mayor parte de la planta hotelera opta por cerrar sus puertas. Como ejemplo, durante el pasado mes de diciembre la isla recibió a 140.623 visitantes, de los que solo 52.085 recurrieron al hotel para alojarse. El peso minoritario de la planta hotelera se ha dado también en meses como noviembre, enero y febrero.
El INE e Ibestat apuntan a que de los 10,9 millones de visitantes llegados a Mallorca durante el pasado año, 7,3 millones recurrieron a los hoteles y similares, 1,5 millones a viviendas en alquiler, 599.597 a segundas residencias de su propiedad, y 1,2 millones a otros tipos de alojamientos fuera de mercado, como el ya mencionado de las casas de "familiares o amigos". A ello se suman 249.183 que usaron otras instalaciones de mercado.
Como se ha indicado, se trata de un fenómeno que afecta al conjunto del archipiélago, dado que Balears recibió el pasado año a casi 15,4 millones de visitantes, de los que 10,1 millones fueron a hoteles, poco más de dos millones a casas de alquiler, 916.789 a inmuebles de su propiedad, 1,7 millones a viviendas de familiares o amigos, y 124.000 a otros tipos de alojamiento fuera de mercado.
Tal y como se ha indicado, Balears recibió durante 2016 a algo más de 15,3 millones de turistas, lo que supone un incremento del 10,8% respecto a 2015 y una cifra sin precedentes en las islas. De ellos, 13 millones fueron extranjeros y casi 2,4 españoles, con un incremento anual del 11,9% para los primeros y del 5,1% para los segundos.
En relación al turismo llegado desde otros países, su crecimiento del 11,9% se sitúa por encima de la media nacional, del 10,3%, aunque los incrementos más acentuados durante 2016 corresponden a la Comunidad Valenciana (16,6%), Madrid (13,5%), Canarias (13,2%), y Andalucía (12,8%).
Nacionalidades
En cuanto a las nacionalidades de los visitantes extranjeros de Balears, los alemanes se mantienen como los más numerosos, con 4,5 millones y un crecimiento anual del 5,9%, seguidos de los británicos, que se acercan a los 3,7 millones y muestran un incremento del 8,4%.
A una distancia considerable aparecen los 815.602 turistas llegados de los Países Nórdicos (Dinamarca, Finlandia, Noruega, Suecia e Islandia), que han aumentado un 30,6%; los 689.450 italianos, que han crecido un 6%; los 630.232 visitantes llegados de los Países Bajos, con un aumento del 57%; y los 628.010 franceses, con un alza del 14,7%. Los rusos solo suponen ya 75.809 turistas, pese a crecer un 47%.
Por otro lado, del total de casi 15,4 millones de turistas llegados a Balears, 6,1 millones contrataron su estancia a través de paquete turístico, mientras que algo más de 9,2 millones lo hicieron sin él, lo que refleja la importancia del colectivo que llega al archipiélago sin la mediación de un tour operador.
