Los ayuntamientos pequeños y medianos de las islas no disponen de infraestructuras suficientes para tener digitalizados los miles de expedientes administrativos que manejan. Por esa razón, a los juzgados de lo contencioso-administrativo sigue llegando papel, mucho papel que hay que procesar.
La orden a las Administraciones es que faciliten los expedientes en discos compactos, pero no todas lo hacen.
El documento impreso no ha desaparecido pese a las intenciones del ministerio en ese sentido.
Esta realidad obliga a tener que seguir dando traslado a las partes de los expedientes en soporte papel, como se ha venido haciendo toda la vida.