El foco de las moscas que han aparecido en los quirófanos del hospital Can Misses se encuentra en el subsuelo del edificio, según acaban de informar el director médico, Pedro Fernández, y el director de Gestión del Área de Salud, Yago Gómez.
Han explicado que ya se ha procedido a eliminar los insectos y tras la fumigación el siguiente paso será una limpieza total y a fondo de la zona para poder retomar la normal actividad cuanto antes, aunque todo apunta a que no podrá ser hasta el martes. Ya se han suspendido la cuarentena de operaciones que había previstas para el lunes.
El hospital ha tenido que operar hoy de urgencia a un paciente que no podía ser enviado a Mallorca, y no se prevén más traslados por hoy (solo ha habido uno, que tuvo lugar anoche).
De momento el hospital mantiene la idea de abrir un expediente sancionar a la empresa concesionaria encargada de la limpieza y desinsectación del centro hospitalario ya que todo apunta a que la presencia de moscas se debe a un fallo en la gestión de esta empresa.
Hasta el martes, nada programado
El hospital Can Misses prevé reabrir los quirófanos a lo largo del próximo lunes para poder realizar las operaciones urgentes. Sin embargo, la actividad programada no se retomará seguramente hasta el martes.
Can Misses sigue hoy con siete de sus nueve quirófanos cerrados tras detectar ayer «multitud de moscas», según anunciaron el gerente del Área de Salud de Ibiza y Formentera, Josep Balanzat, y el director médico, Pedro Fernández. Balanzat explicó que fue el coordinador del bloque quirúrgico el que, a las ocho de la mañana, vio que había insectos, «sobre todo en los pasillos».
La dirección del centro optó por cerrar todas las salas de operaciones del bloque quirúrgico, siete de las nueve con las que cuenta: «Lo hemos valorando junto con la concesionaria, que es la responsable de la limpieza, mantenimiento y desinsectación de quirófanos, y asesorados por el servicio de Microbiología y el de Medicina Preventiva de Son Espases». Esto ha obligado a suspender todas las intervenciones programadas para ayer (un total de 36) y hoy (otras 20). Todos los pacientes que necesiten una intervención urgente, es decir, aquellos cuyos médicos consideren que no pueden esperar, se trasladarán a los hospitales mallorquines de Son Espases o Son Llàtzer, con los que ayer por la mañana el director médico ya se puso en contacto. También se ha pedido al 061 que esté preparado para un posible incremento de traslados en helicóptero este fin de semana.
El primer trasladado
El hospital Can Misses trasladaba anoche en helicóptero a Palma de Mallorca al primer paciente para ser operado en la isla vecina debido al cierre de los quirófanos.
En estos momentos permanecen abiertos los quirófanos de paritorio, que se encuentra en otra zona, y el de Urgencias, que tampoco está afectado. En este último, se podrán realizar intervenciones de urgencia cuando los médicos consideren que el paciente no está lo suficientemente estable hemodinámicamente como para aguantar el traslado.
«Sobre cada caso decidirán los facultativos de guardia», apuntó el gerente. Ayer a las cuatro de la tarde no se había efectuado ningún traslado a Mallorca ni ninguna intervención de urgencia en el quirófano «limpio».Localizar el foco
Fernández destacó que todas las intervenciones suspendidas se reprogramarán «de forma inmediata», de manera que no habrá «un retraso excesivo en las operaciones». El director médico indicó que si es necesaria una intervención urgente pero no vital, cabe la posibilidad de esperar «hasta el lunes o el martes».
La gerencia no descarta que también tengan que suspenderse las intervenciones previstas para el lunes. En estos momentos, la concesionaria está intentando «localizar el foco» del que han surgido las moscas. El propio Balanzat señaló ayer a mediodía que, aunque desconocen aún la familia exacta de los insectos, aseguró que se trata de «ejemplares adultos».
Cuando se haya localizado el foco y eliminado el problema, se realizará un análisis microbiológico en la zona quirúrgica. Este análisis necesita un mínimo de 48 horas, tras lo que, si todo sale bien, se podrán reabrir las salas de operaciones. «No se trata de una obra, pero se van a mover plafones y puede haber contaminación de aire, por eso hay que hacer un cultivo», indicó el gerente, que añadió: «Hay que sembrar las muestras y se tarda 48 horas en ver el resultado».
Un hecho extraordinario
Fernández, insistió en que la aparición de moscas en el bloque quirúrgico se trata de algo «extraordinario»: «Se ponen medios para que esto no ocurra, pero hay que actuar de forma enérgica si ocurre». El gerente recalcó que el cierre de las siete salas de intervenciones no implica que en todas ellas se hayan detectado moscas: «Por seguridad ha habido que actuar de forma drástica».
En un primer momento, la gerencia se planteó la posibilidad de usar el quirófano de paritorio para las intervenciones urgentes, idea que descartaron rápidamente: «Está para cesáreas y otras intervenciones en las que el resultado puede depender de minutos. Se usará para lo que está acondicionado, todas las intervenciones relacionadas con los partos».
El gerente indicaba ayer que abrirán un expediente informativo a la concesionaria del hospital por este tema para ver qué ha ocurrido. A pesar de esto, Balanzat indicó que están a la espera de comprobar de forma «exhaustiva» si la empresa ha realizado todas las actuaciones necesarias de limpieza, mantenimiento y desinsectación del bloque quirúrgico.
