La presidenta del Parlament, Xelo Huertas, ha rechazado este martes que se le llame "tránsfuga" y ha insistido en defender ante los tribunales sus derechos fundamentales, tras su expulsión del Grupo Parlamentario Podemos.

En un comunicado, Huertas ha manifestado su rechazo a que se le imputen "actuaciones corruptas de ningún tipo", puesto que su actuación "ha sido ajustada al derecho en todo momento".

Además, ha expresado su respeto por los tribunales y ha remarcado que las actuaciones ante la justicia tienen como finalidad defender no sólo sus derechos fundamentales "sino también la independencia y salvaguarda de la figura de la presidencia del Parlament ante cualquier injerencia o coacción".

"Mientras sea presidenta de esta institución, trabajaré para que su funcionamiento no se vea afectado por la polémica creada, tal y como he hecho siempre", ha apuntado Huertas.

Finalmente, la presidenta ha lamentado "profundamente" la "imagen que puede llegar a la ciudadanía, que no se merece este comportamiento por parte de sus representantes".