La alianza entre PP y Xelo Huertas se ha mantenido en la Junta de Portavoces del Parlament de esta mañana que, tras dos horas de tensa reunión, ha acabado sin ningún avance y con la presidenta de la Cámara, Xelo Huertas, en su cargo a pesar de su expulsión de Podemos.
El PP ha pedido un informe de la letrada del Parlament sobre cómo debía producirse la destitución de Huertas y si afectaba el que esté pendiente de la decisión judicial respecto a si deja en supenso su expulsión de Podemos como medida cautelar, tras la demanda que ha presentado contra su antiguo partido y para la que ha sido citada a declarar para el 9 de febrero. Los partidos del Pacto han rechazado en la Junta pedir este informe, para no ser "cómplices" de la "maniobra dilatoria" para retrasar la destitución de Huertas, según ha explicado Andreu Alcover, portavoz del PSOE. El PP pedirá el miércoles en la Mesa del Parlament de nuevo este informe y la portavoz popular, Marga Prohens, ya ha dicho que no adoptarán ninguna decisión hasta que esté elaborado, por lo que la Cámara continuará bloqueada con Huertas como presidenta.
Los portavoces del Pacto han admitido que no tienen vías para forzar la destitución de Huertas, ante la "mayoría" de bloqueo que forman PP y Huertas en la Mesa del Parlament, y han culpado al PP de "secuestrar" la institución. Dada la situación, el Pacto no descarta estudiar la posibilidad de recurrir a los tribunales al entender que los populares están impidiendo que se cumpla el reglamento de la Cámara. "El PP se comporta como un ave de rapiña, como un voltor carroñero lanzado para secuestrar el Parlament", ha afirmado Laura Camargo, portavoz parlamentaria de Podemos, quien ha emplazado al PP a cambiar su estrategia y a Huertas a dimitir. Así, ha admitido que salvo esta dimisión o que el PP retire su apoyo a Huertas, esta podrá seguir dilantando su destitución. La popular Marga Prohens insiste: "Hay dudas jurídicas".
