El grupo parlamentario de Podemos negó ayer haber falsificado una firma de su exdiputada Monserrat Seijas, como sostiene esta en una denuncia que investiga el juzgado de instrucción dos de Palma.
Seijas, que fue expulsada de Podemos, sostiene que alguien de su grupo parlamentario suplantó su firma en un escrito dirigido a la Mesa del Parlament para anunciar la retirada de unas interpelaciones al Govern, que ella había solicitado en septiembre del año pasado.
Desde Podemos se explicó ayer que nadie ha imitado o suplantado la rúbrica de Seijas, sino que el grupo parlamentario, con la anuencia de sus integrantes, funcionaba con firmas escaneadas para agilizar los trámites.
El uso de la firma digital de Seijas, que junto a la todavía presidenta del Parlament Xelo Huertas, fue suspendida cautelarmente en Podemos el 7 de noviembre, ha sido calificado de "un error administrativo del grupo parlamentario por seguir un procedimiento rutinario como es el sistema automatizado de firmas".
Desde la fuerza morada se insistió en que lo que aparece en el documento de renuncia a las preguntas es la firma auténtica de Monserrat Seijas.
La diputada menorquina no comunicó en esas fechas a su antiguo grupo parlamentario que no podían usar su rúbrica digitalizada, algo que sí solicitó posteriormente tras conocer el escrito de retirada de las preguntas a la consellera de Salut.
Seijas, no obstante, mantiene que desde su antiguo grupo se le privó de sus derechos de representar a los ciudadanos y controlar al Govern al impedir interpelar a la consellera de Salut.
Según la denunciante, nadie de su partido le consultó, le informó o le pidió autorización para renunciar a aquellas interpelaciones.
El juez Pedro Barceló citará a los responsables de Podemos en el Parlament para aclarar qué ocurrió con la firma de la denunciante y si se vulneró su derecho a ejercer como parlamentaria.
Seijas acudió el viernes al juzgado de instrucción 2 de Palma a ratificar su denuncia y explicar cómo funcionaba el grupo parlamentario de Podemos. Seijas y Huertas fueron expulsadas de Podemos el 5 de diciembre.
