Y José Ramón Bauzá volvió a salir a la palestra el día que más lo necesitaba Francina Armengol. Ya lo hizo el pasado mes de noviembre, cuando la crisis de Podemos estalló y tenía al Pacto de izquierdas contra las cuerdas. El expresident del Govern anunció que se presentaba al congreso regional y ello permitió que la presidenta Francina Armengol tuviera unos días de respiro al acaparar las portadas el senador. Ayer Armengol estaba tocada. No le gustó nada todo lo ocurrido con Podemos, anunciado la expulsión de Xelo Huertas en pleno debate de los presupuestos, eclipsando por completo la acción de su Govern y arrastrando a todo la izquierda al tópico del "tienen lío permanente".
Sin embargo, Armengol tenía su bálsamo secreto para aliviar los días de angustia que le dan los chicos del partido de los círculos morados. Este no es otro que su predecesor, José Ramón Bauzá. Además lo hizo con contundencia, utilizando un guión que con total seguridad ni desde el Consolat de Mar lo habrían escrito mejor. Habló de TIL, se refirió al catalán solo como mérito y apostó por derogar la ecotasa. No faltaba ni uno de los argumentos que movilizan a la izquierda.
Armengol se alegró tras la copa
El Govern celebraba ayer su copa de Navidad. La presidenta Armengol lucía un semblante de preocupación por todo la crisis originada con Xelo Huertas. Tras la copa y departiendo con periodistas y sus consellers se animó. Con total seguridad ya sabía que Bauzá había verbalizado que si ganaba pondría en marcha las políticas que sacaron a 100.000 almas a la calle en 2013, antesala de la victoria de la izquierda en 2015.
Miralles, mano dura en el Consell
Al vicepresidente del Consell Francesc Miralles le tocó ayer presidir el pleno de la institución. No se arrugó a la hora de exhibir la mano dura y pedir educación al público durante el intenso debate por la Diada.
