Restringir el avance del arrendamiento turístico en suelo rústico será uno de los objetivos del Consell de Mallorca a la hora de regular cada una de las nuevas zonas en que ha dividido la isla. Según reveló Mercedes Garrido, el 6,8% de la actividad de arrendamiento vacacional se está desarrollando en casas de campo. Además, recordó que la mayor parte de infracciones urbanísticas detectadas en suelo rústico son ampliaciones o construcciones de piscinas, con la única finalidad de aumentar el atractivo de la finca para el alquiler a turistas.

En este sentido, la consellera insular de Territorio habló de la situación delicada que se produce en la zona norte, especialmente Alcúdia y Pollença, pero también en la Serra de Tramuntana. También indicó que la propia reforma de la ley prohibirá de forma clara el alquiler turístico en Áreas Naturales de Especial Interés (ANEI).