El juez de Instrucción número 3 de Palma, José Castro, ha mantenido el secreto sobre la agenda del exconsejero madrileño Francisco Granados fijada por la Audiencia Nacional, al rechazar la petición de levantamiento formulada por el empresario Juan Miguel Villar Mir, investigado en el caso Son Espases.

Castro ha dictado un auto en el que dispone que no hay lugar a levantar el secreto que afecta a la agenda personal de Granados, como solicitaba el presidente de la constructora OHL, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Baleares.

En el marco del caso Son Espases, que investiga el presunto amaño de la adjudicación de las obras del hospital balear, Castro pidió el pasado febrero al juzgado 6 de la Audiencia Nacional la agenda de Granados, intervenida en un registro en su domicilio en el marco del caso Púnica, por si contuviera datos sobre el presunto fraude en la licitación de esa construcción.

En el auto de hoy, Castro señala que la agenda "sigue afectada por especial secreto" y no cabe que él lo levante sin esperar a que lo haga antes el Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional que en su día lo acordó.

El magistrado también ha desestimado el recurso de reforma planteado por Villar Mir contra su decisión de denegar el archivo del caso Son Espases en lo que afecta al empresario. Señala que será la Audiencia de Palma la que resolverá sobre su petición de sobreseimiento.

Castro denegó en julio pasado archivar la causa para Villar Mir en una resolución en la que también rechazaba la solicitud de desimputación de José Magán, responsable de hospitales de OHL.

El juez instructor señaló entonces que Villar Mir y Magán debían mantener la condición de investigados (imputados) mientras no "se advierta sin género de dudas" que el procedimiento en su contra es erróneo o todas las partes acusadoras anuncien su intención de no acusarles.

Castro afirmó que "lo correcto es aguardar a dar por terminada la instrucción al objeto de hacer una completa valoración del material con el que se cuente".

En este procedimiento se investigan presuntos delitos de malversación de fondos públicos, fraude a la administración, falsedad en documentos oficiales, prevaricación y cohecho.

Además de la presunta manipulación del concurso para la construcción del hospital de referencia de Baleares, la mayor obra pública de las islas con un presupuesto inicial de 780 millones de euros, el juez Castro ha abierto una línea de investigación sobre las posibles conexiones entre la adjudicación pactada y la financiación del PP nacional.

Cuando declaró como investigado en septiembre de 2015, Villar Mir negó que amañara con el expresidente balear Jaume Matas el concurso del hospital en favor de OHL a cambio de una comisión.

Por contra, hizo hincapié en que su empresa resultó perjudicada, ya que finalmente la adjudicación recayó en Dragados.