Las seis personas (cuatro chicas y dos jóvenes) acusadas de un delito contra la libertad de culto por interrumpir una misa en Palma han aceptado dialogar con el administrador apostólico de Mallorca monseñor Sebastià Taltavull de cara a una posible retirada de la acusación contra ellas por parte del Obispado. El encuentro tendrá lugar el próximo lunes por la tarde en el Palacio Episcopal.

Los acusados informaron ayer que acudirán al encuentro después de que el obispo administrador apostólico de Mallorca, Sebastià Taltavull, hiciera el martes por carta "un llamamiento al diálogo" y propusiera un cara a cara "que permita el reconocimiento de una acción no adecuada", y "con la intención de encontrar la mejor solución al caso". "Os espero con la mano extendida", concluía el escrito de Taltavull.

El juicio por este caso está previsto en la Audiencia de Palma a partir del 29 de septiembre. La fiscalía pide que los seis activistas pro aborto libre que interrumpieron la misa sean condenados a 1 año y medio de prisión y la acusación particular que ejerce el Obispado solicita 4 años de cárcel para cada uno. El Obispado ha ofrecido retirar su acusación si los jóvenes admiten que erraron en su manera de protestar contra la fallida reforma de la Ley del Aborto

Los acusados señalaron ayer que valoran la "mano extendida" de Taltavull y consideraron muy positiva la oferta de diálogo y anunciaron que acudirán al encuentro "partiendo de una posición clara y comprometida con los derechos de las mujeres".

Consideran que la propuesta del obispo supone "una prueba clara" de que se trata de "un caso político". "La acción de la iglesia de Sant Miquel no fue ningún acto criminal, fue una respuesta política a una situación política: la contrarreforma de la Ley el Aborto", reiteraron.

Un grupo de apoyo a las Feministes Encausades ha convocado, para el miércoles por la tarde en Palma, una manifestación a favor de las personas acusadas.