La portavoz parlamentaria de Podemos, Laura Camargo, afirmó ayer que el pacto anticorrupción ente PP y Ciudadanos (C's) para la investidura de Mariano Rajoy es una "tabla de salvación para los imputados del PP llegando al punto de aceptar niveles de corrupción". Para Camargo, "este pacto llamado anticorrupción tiene muy poco de anticorrupción", al redefinirse el concepto de corrupción recortándolo.

Precisó que "el ejemplo paradigmático" es el caso de José María Rodríguez, el ex presidente del PP de Palma, imputado por su presunta vinculación a la mafia policial de Palma que habría beneficiado el PP. Camargo resaltó que "según la nueva definición de este pacto (Rodríguez ) no sería un corrupto, sino que sería un caso de mala praxis", a pesar de ser considerado por el juez "el artífice en la sombra de un organigrama corrupto" en beneficio del PP.

Añadió que este caso "le podría vincular a acusaciones tan graves como tráfico y tenencia ilícita de armas, obstrucción a la justicia, tráfico de influencias, prevaricación, negociaciones prohibidas, coacciones, sobornos, amenazas, extorsiones, falsedad, uso de información privilegiada, delitos contra la salud pública, delitos fiscales y delitos contra el medio ambiente, perjudicar enemigos políticos haciendo uso de los servicios públicos de la Policía Local, controlar la concesión de licencias de actividades a empresarios o beneficiarse de sexo gratuito con prostitutas a cambio de favores a empresarios de la noche"

"Están jugando con las palabras", insistió Camargo para quien el pacto anticorrupción entre PP y Ciudadanos consiste en una nueva definición "impuesta" por Rajoy "para llegar a la amnistía política", con la que "Matas, Chaves, Griñán o Camps no serían corruptos".

No obstante, consideró que este acuerdo entre PP y Ciudadanos es "papel bañado" ya que Rajoy no cuenta con los apoyos necesarios para ser investido presidente. Para Camargo, "después de3 que Rajoy fracase" en sus intento, "se abre la puerta para poner en marcha una alternativa para un Gobierno de cambio, en la que estaría Podemos, y que es "necesaria" para no seguir "con lo mismo que se ha padecido en estos últimos cuatro años".

El PP presiona a Sánchez

El PP balear no contempla la posibilidad de un Gobierno alternativo, previo acuerdo entre PSOE y Podemos, según se deduce de las declaraciones de la diputada popular de las islas Nuria Riera, quien reiteró el mensaje de su partido de que ahora le corresponde a Pedro Sánchez "decidir si quiere ir a unas terceras elecciones, que serían un desastre, y seguir con este caos o quiere ser el líder de la oposición y permitir que haya Gobierno". Es decir, apoyar la investidura de Rajoy.

"Estamos en una situación excepcional en la que se necesita conformar un Gobierno a nivel nacional que piense en los intereses de todos los españoles", dijo Riera quien instó a los socialistas a "dar un paso adelante en favor de todos los españoles" y "sumarse a este pacto o al menos dejar gobernar al PP".