Después de tres años de apreciables crecimientos, Baleares, y más concretamente Mallorca, comienzan a estabilizar su índice de siniestralidad laboral. Pese a ello, las islas siguen siendo líderes en el conjunto del país por lo que a tasa de accidentes en el trabajo se refiere, una situación que va a tardar años en modificarse, según se reconoce tanto desde los sindicatos como desde el propio Govern.

Según los datos facilitados desde la Dirección General de Trabajo del Ejecutivo balear, el índice de siniestralidad en Mallorca durante los cinco primeros meses del año ha sido de una media de 362,7 accidentes por cada 100.000 afiliados a la Seguridad Social. La relevancia de esta cifra radica en que aunque sigue mostrando un crecimiento en relación al mismo periodo de 2015, éste es mínimo y se sitúa en un 0,1%. En el conjunto del archipiélago, ese aumento es del 0,6%.

Este dato pone en evidencia una patente desaceleración en la evolución de este problema. En concreto, durante los cinco primeros meses de 2012 el índice de siniestralidad en Mallorca se redujo un 21,6% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, pero en los mismos plazos de 2013 mostró ya un incremento del 7,6%, para volver a aumentar un 6,1% en 2014, y mostrar un nuevo crecimiento del 3,7% en 2015. La situación con la que se ha entrado en 2016 es prácticamente de estabilización, con el alza del 0,1% antes señalada.

En cualquier caso, el balance de estos cinco primeros meses es de 4.916 accidentes en Balears, aunque la inmensa mayoría son de carácter leve. De la misma forma, las islas se mantienen como la comunidad autónoma con el índice más alto de siniestralidad, según se señala desde el Govern.

Los datos facilitados por el ministerio de Empleo respaldan este negativo liderazgo: entre junio de 2015 y mayo de 2016 se registraron en el archipiélago 16.786 accidentes laborales, de los que 16.685 fueron leves, 92 de carácter grave y nueve mortales.

Eso supone un índice de siniestralidad del conjunto de esos doce meses en Balears de 4.584,9 accidentes por cada 100.000 trabajadores en activo (la diferencia con el dato facilitado por el Govern es que en este caso de trata del conjunto de esos doce meses y del conjunto de las islas, y no una media de los cinco primeros meses del año en Mallorca). Esta tasa es, con diferencia, la más elevada del país, con Castilla-La Mancha en segundo lugar pero a una considerable distancia, al mostrar un índice de 3.959 siniestros por cada 100.000 trabajadores, y Asturias en tercero, con 3.602. El índice medio de España es de 3.211,3, y las autonomías con los niveles más bajos son Madrid, con 2.725,2; y la Comunidad Valenciana, con 2.935,1.

¿Qué tienen de especial las islas para mostrar un problema tan acentuado? El primer punto a tener en cuenta es que la tasa de accidentes mortales ha sido durante los doce meses antes señalados inferior a la media española (2,5 siniestros por cada 100.000 trabajadores en las islas frente a los 3,4 de la media estatal), mientras que en los graves la supera ligeramente (25,1 en Balears y 24,1 en España). El gran problema en el archipiélago son los leves: 4.557 por 100.000 afiliados a la Seguridad Social cuando en España este índice es de 3.184. Así pues, resulta evidente que la gran asignatura pendiente de las islas es rebajar esa siniestralidad leve.

La explicación, según los responsables de Salud laboral de CCOO y de UGT en las islas, Rogelio Marín y Xisco Mulet respectivamente, es simple: durante la temporada turística las sobrecargas de trabajo que se aplican sobre muchos trabajadores y la falta de descansos (al no librar los días contemplados en los convenios y superar las jornadas establecidas) favorecen el que se registren sobreesfuerzos o caídas, causas de una gran parte de estos siniestros.

La explicación que desde los sindicatos se da a la notable pérdida de velocidad que se ha registrado durante los primeros meses de este año en los aumentoas del índice de siniestralidad tiene que ver con las campañas de inspección y de visitas informativas a las empresas que se están impulsando desde la conselleria de Trabajo, con el refuerzo del personal técnico que se ha puesto en marcha.

Desde Trabajo se añade entre estos factores el que la mejoría que se está dando en la economía balear permite también a las empresas elevar su inversión en medidas de prevención, aunque se recuerda que este departamento ha puesto a sus técnicos a visitar las empresas para orientar en materia de seguridad, dentro de una campaña que ahora se desarrolla principalmente en la hostelería y que a partir del otoño tendrá a la construcción como prioridad.