El juez que investiga el presunto amaño en la adjudicación del hospital Son Espases de Palma, José Castro, ha denegado la petición de sobreseimiento que planteó el presidente de la constructora OHL, Juan Miguel Villar Mir, imputado en la causa junto al expresidente balear Jaume Matas y otras siete personas.

Castro ha adoptado la misma resolución respecto a la solicitud de desimputación de José Magán, responsable de hospitales de OHL, según ha informado hoy el Tribunal Superior de Justicia de Baleares.

En sendos autos, el juez instructor señala que Villar Mir y Magán han de mantener la condición de investigados (nueva denominación legal de lo que antes se llamaba imputados) mientras no "se advierta sin género de dudas" que el procedimiento en su contra es erróneo o todas las partes acusadoras anuncien su intención de no acusarles, algo que no ocurre en sus casos.

"Lo correcto es aguardar a dar por terminada la instrucción al objeto de hacer una completa valoración del material con el que se cuente", argumenta Castro.

El pasado 3 de junio el titular del juzgado de instrucción 3 de Palma decidió ampliar por un máximo de un año el periodo de instrucción del caso Son Espases pese a la opinión contraria del fiscal Pedro Horrach, que considera que la investigación ha concluido y ya hay suficientes datos para ir a juicio.

En este procedimiento se investigan presuntos delitos de malversación de fondos públicos, fraude a la administración, falsedad en documentos oficiales, prevaricación y cohecho.

Además de la presunta manipulación del concurso para la construcción del hospital de referencia de Baleares, la mayor obra pública de las islas con un presupuesto inicial de 780 millones de euros, el juez Castro ha abierto una línea de investigación sobre las posibles conexiones entre la adjudicación pactada y la financiación del PP nacional.

Cuando declaró como investigado en septiembre de 2015, Villar Mir, negó que amañara con el expresidente balear Jaume Matas el concurso del hospital en favor de OHL a cambio de una comisión.

Por contra, hizo hincapié en que su empresa resultó perjudicada, ya que finalmente la adjudicación recayó en Dragados.

En la misma línea, Magán sostuvo que nunca participó en un supuesto fraude en la adjudicación del hospital y recalcó que las irregularidades se produjeron en favor de su competidor.