Baleares es la cuarta comunidad autónoma con más denuncias por delitos de odio relacionados con la orientación sexual, motivo por el que la asociación LGTBI de las islas y el Govern balear han presentado una campaña de sensibilización ciudadana ante esta problemática.

La consellera de Servicios Sociales y Cooperación, Fina Santiago, y el presidente de la asociación LTGBI de Baleares Ben Amics, Jan Gómez, han presentado hoy esta iniciativa contra los delitos de odio por orientación o identidad sexual frente a los juzgados de Vía Alemania de Palma porque "aquí es donde debe acabar la denuncia", ha destacado la representante del Govern.

La campaña va dirigida especialmente a los profesionales de los cuerpos de seguridad del Estado y a los trabajadores de los servicios sociales "para que sean ellos los que actúen de agentes de cambio para poder combatir esta situación", ha explicado Gómez.

Según el activista, solo el 20% de las personas que sufren una agresión por odio relacionado con la identidad sexual denuncian, lo que tiene varias explicaciones, entre ellas que aún existe miedo a revelar su condición, y "a la escasa formación de los cuerpos de seguridad en el trato y acompañamiento a las víctimas".

El denunciante en la mayoría de las ocasiones no ve en los cuerpos de seguridad un factor de apoyo y sufre "una doble victimización por parte de la Policía porque no se da un trato digno, ni se clasifican las denuncias como se debería", ha destacado Gómez.

Ha apuntado que es todavía "difícil" calcular el avance de la problemática, ya que los datos estadísticos son "muy dispares"; así, según el Ministerio del Interior, en 2014 se registraron 44 incidentes en Baleares por orientación sexual, y en 2015, solo cuatro.

Para el activista, "es imposible" tanta variación sin una acción concreta de por medio, por lo ha apuntado un "sesgo en la clasificación o en la recogida por parte de los cuerpos de seguridad", y ante lo que "hay que empezar a trabajar".

La iniciativa consiste en carteles de sensibilización para colocar en espacios públicos y locales para que cualquier ciudadano se anime a denunciar un delito de odio, ya sea víctima o testigo.

Además, se repartirán trípticos con "una guía básica" que explica qué son los delitos de odio, cómo actuar antes estas agresiones, y en el que se recomienda acudir en primera instancia a asociaciones como Ben Amics, donde cuentan con atención y asesoramiento especializados.

Para Gómez es necesario esta campaña porque "están volviendo a surgir" delitos de ocio en la sociedad, como demuestra, por ejemplo, la aparición de pintadas neonazis en el centro de Palma.

Por su parte Santiago ha expresado el apoyo del Govern a esta campaña "que tiene mucho más sentido a raíz de la aprobación de la ley LGTBI", ya que aún se "necesita mucha sensibilización ciudadana y profesional" en el respeto hacia la diversidad sexual.

Santiago ha recordado datos de una encuesta de la Agencia Europea de Derechos Humanos de 2009, que apunta que el 32 % de las personas consideran que denunciar no sirve para nada, el 16 % teme represalias y a un 15 % le da vergüenza porque no quiere revelar su preferencia sexual.

Ha indicado que a nivel administrativo la ley autonómica, que no ha supuesto ningún expediente sancionador hasta ahora, hará "todo lo que posible para facilitar la igualdad".