Durante los primeros cinco meses de este año se han vendido en Balears 5.672 viviendas, lo que supone un incremento del 38,5% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Resulta especialmente destacable el caso de mayo, ya que solo en ese mes los inmuebles adquiridos en el archipiélago han ascendido a 1.440, con un alza interanual del 70%, la más acentuada del país, según los datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Un dato a destacar es el enorme peso que la vivienda de segunda mano ha adquirido en este crecimiento, algo que desde el sector se achaca a la escasez de inmuebles de nueva edificación. Así, durante esos cinco primeros meses del año, solo 1.350 de esas residencias eran nuevas, frente a las 4.322 usadas.

Si nos limitamos a los datos de mayo, 1.023 viviendas vendidas eran de segunda mano, frente a las 417 de nueva construcción.

Un aspecto a destacar es que las cifras de este año se asemejan ya a las que se registraban a principios de 2008, cuando comenzaba a 'desinflarse' la denominada burbuja inmobiliaria.

Dos aspectos hacen que los datos de mayo seas especialmente relevantes. En primer lugar, el incremento interanual del 70% que se ha registrado en Balears es el más elevado del país, seguido del 68,9% de La Rioja y del 61,8% de Murcia, y muy lejos del 23,8% de la media española.

Pero además, la venta de 1.440 residencias durante ese mes supone una tasa de 159 por cada cien mil habitantes, de nuevo la más alta de España, seguida de las 155 de La Rioja y las 132 de Murcia, frente a una media de 99 para el conjunto del país.

En el caso de las fincas isleñas transmitidas en mayo, su número se situó en 4.822.

Causas del crecimiento

Según se apunta desde el sector inmobiliario de las islas, en Balears se está sumando la demanda derivada del crecimiento de su población y del cambio en el tipo de hogar, con un peso creciente de los unifamiliares, con la que viene de los extranjeros que aspiran a contar con una segunda residencia. Pero se añade un tercer factor: la escasez de viviendas de las islas y la revalorización que éstas registran hace que se estén convirtiendo en el destino de muchos ahorros, dada la nula rentabilidad de los depósitos bancarios y de la fortísima volatilidad que padece la Bolsa.