La conselleria de Servicios Sociales del Govern está elaborando un plan para poder hacer frente a la gran demanda de plazas de residencias de asistidos que tiene Balears. Existe una lista de espera de 1.400 ancianos que están pendientes de poder ingresar en las dependencias públicas. La consellera Fina Santiago asegura que las islas necesitan en estos momentos ocho geriátricos nuevos para poder acoger a las personas que precisan asistencia.

El objetivo del Govern, según relató Fina Santiago, es que se pueda construir una residencia cada año. En Mallorca se precisan seis geriátricos, otro en Eivissa y otro en Menorca. Mientras tanto, el Govern está intentando buscar plazas en residencias municipales y firmando conciertos con las privadas. De esta forma, se ha conseguido recolocar a 232 personas asistidas en los últimos meses.

En concreto, se han logrado 180 plazas en residencias concertadas, otras 28 en ampliaciones de contratos en centros gestionados por entidades privadas, ocho en la residencia de Alcúdia, siete en la de Muro, cinco en la de Artà y cuatro en la de Santa Maria del Camí.

"En Balears tenemos un grave problema para poder construir infraestructuras sociales como son las residencias. El alto valor del suelo hace que el coste se dispare y los solares que tienen los ayuntamientos en muchas ocasiones son insuficientes", aseveró Fina Santiago.

Construir una nueva residencia para personas asistidas tiene un coste aproximando de 8 millones de euros. El Govern confía en poder edificar, como mínimo, una cada año durante esta legislatura. No obstante, mientras esto ocurre, están trabajando en la recolocación de las personas con más necesidades en los diferentes geriátricos de los pueblos y concertando plazas en las privadas. Lo ideal son centros de 120 plazas por su operatividad. Por ello, el plan del Govern contempla poder conseguir unas 800 plazas con las seis residencias que tiene proyectado edificar en Mallorca, más las 240 plazas de los de Eivissa y Menorca.

Fina Santiago fue la principal defensora de que se pudiera destinar dinero de la ecotasa a infraestructuras sociosanitarias. Si hubiera sido posible, según la consellera, los geriátricos que necesitan las islas se podrían haber construido de forma más rápida y atender la enorme demanda que existe para personas asistidas. No fue posible porque algunos partidos del pacto de izquierdas, en concreto Podemos, se negó a ello apostando por un impuesto turístico de carácter mucho más ambiental.

Ratios más bajos de Europa

Balears cuenta con los ratios del número de residencias más bajos de Europa. En las islas solo hay cinco plazas de residencias por cada 100 habitantes mayores de 80 años, cifra por la que se mide la oferta sociosanitaria de un territorio. Está muy por debajo de la media nacional de España que son 13,7 plazas por cada 100 personas en edad superior a los 80 años.

Si lo comparamos con los países europeos, la diferencia es abismal. Por ejemplo, Francia tiene 19,6 plazas por cada 100 habitantes mayores de 80 años y Alemania llega a las 16,7 plazas.

La consellera Santiago apuntó otro dato revelador que indica que Balears necesita con urgencia incrementar su oferta pública de servicios sociosanitarios. La oferta pública de residencias de ancianos únicamente llega al 50%. "¿Qué pasaría si, por ejemplo, la sanidad pública solo llegara al 50% de la demanda?", se preguntó la titular de Servicios Sociales del Govern. Acto seguido respondió a su pregunta: "No se podría admitir que los hospitales públicos solo supusieran la mitad de lo que necesita una comunidad".

El municipio de Palma, localidad que alberga el 50% de la población de Mallorca, es donde existe mayor número de demanda y es donde se tendrían que construir la mayoría de geriátricos que necesita Mallorca. Para ello, Fina Santiago, indicó que ya están hablando con el área de Urbanismo del Ayuntamiento de Palma para buscar solares. Santiago y el teniente de alcalde Antoni Noguera ya han mantenido algunas reuniones para buscar solares municipales apropiados para la construcción de residencias para asistidos. Una de las opciones que se están barajando es un solar municipal en la zona conocida como Son Martorell.

Otra posibilidad sería poder aprovechar el edificio del antiguo hospital de Son Dureta. No obstante, está opción es remota debido al alto coste que supone reformar Son Dureta. Hay que tener en cuenta que el edificio es propiedad de la Tesorería General de la Seguridad Social, que lo tiene cedido al Govern siempre que se le dé un uso sociosanitario. El antiguo hospital materno infantil podría albergar un residencia.