El pleno del Parlament aprobó ayer por asentimiento de todos los grupos la Ley para la recuperación de desaparecidos durante la Guerra Civil y la dictadura franquista, tras un debate en el que los portavoces pusieron de relieve el consenso alcanzado, que pasó por rebajar la consideración de "crímenes contra la humanidad", que por lo tanto no prescriben, refiriéndose a "posibles" crímenes contra la humanidad. El texto aprobado ayer, hasta ahora denominado Ley de Fosas, llegó al pleno con un amplio consenso, que se convirtió en apoyo unánime tras alcanzarse un acuerdo poco antes del debate para las pocas enmiendas que mantenían PP y Ciudadanos, referidas al artículo en el que se plantea la cuestión de crímenes contra la humanidad.

El citado artículo establecía que "por el carácter masivo que presente el encuentro de restos humanos con signos de violencia en las fosas de la Guerra Civil y de la dictadura franquista" en Balears, el Govern "denunciará ante Fiscalía la existencia de indicios de la comisión de crímenes contra la humanidad de naturaleza imprescriptible y efectos permanentes". Al texto se añadió la palabra "posibles" precediendo a la expresión "crímenes contar la humanidad".

Este fue el cambio sustancial que hizo que ayer la Ley recibiera el apoyo unánime de la Cámara, aunque durante la tramitación ya se habían producido modificaciones de la propuesta inicial para propiciar el consenso, entre ellos la del título, que pasa a ser Ley para la recuperación de Desaparecidos durante la Guerra Civil y la dictadura en Balears.

La Ley establece la competencia del Govern en la localización e identificación de los desaparecidos por razones políticas, ideológicas y religiosas durante la Guerra Civil y la dictadura franquista en Balears y, si es posible, la recuperación e identificación de sus restos. Asimismo tiene como objetivo la protección y preservación de las fosas y la regulación de las actividades para su localización, identificación, señalización, identificación y, si es posible, su exhumación.

El ambiente de consenso quedó claro desde la primera intervención del debate, a cargo del portavoz de Ciudadanos, Xavier Pericay, que recibió un aplauso unánime de todos los grupos. "Celebramos un acto de justicia que servirá para cerrar heridas que debían haberse cerrado hace tiempo", dijo Pericay. El popular Miquel Jerez, quien resaltó como símbolo de "concordia" la figura del que fuera máximo dirigente de CCOO y destacado comunista Marcelino Camacho, afirmó que "recordar nos humaniza, la memoria es vida y no se puede obligar a las personas al olvido".

Maria Antònia Oliver, presidenta de Memòria de Mallorca, valora la aprobación de la Ley de Fosas en el Parlament

Maria Antònia Oliver, presidenta de Memòria de Mallorca, valora la aprobación de la Ley de Fosas en el Parlament

La coordinadora de la Ley, Margalida Capellà (Més), quien recibió unánimes alabanzas, resaltó el trabajo de todos los grupos por alcanzar un consenso. "Hay temas en los que no hay que vencer , sino convencer", afirmó. La socialista Silvia Cano sostuvo que esta Ley es una "obligación moral" hacia las víctimas. "No podemos cambiar el pasado, pero sí reconocer los valores de la democracia frente al franquismo y la barbarie", dijo Cano quien en algún momento tuvo que interrumpir su discurso visiblemente emocionada. Baltasar Picornell, de Podemos, desplegó una bandera republicana y resaltó que con esta Ley "se da un gran paso para cerrar heridas".

Al debate asistieron miembros de Memòria de Mallorca, cuya presidenta, Maria Antònia Oliver, mostró su satisfacción. "No es un tema político, sino de humanidad", resaltó Oliver.