Lograr plaza en el colegio deseado plaza en el colegio deseado para los hijos es un asunto de primer orden para las familias, y muchas viven la noche previa a la publicación de las listas de admitidos con nervios. En determinados centros con altísima demanda, los padres echan cuentas, suman puntos y cruzan los dedos confiando en que no haya mucha competencia.
El próximo 6 de junio será el ´día D´ para alrededor de 10.500 niños, que empezarán su andadura en el sistema escolar de Balears. Para los padres desconformes, aún queda una última oportunidad: tienen los días 7 y 8 para presentar una reclamación. Más del 90% de familias logran plaza en la primera o en la segunda opción. El día 9 se publica la adjudicación de plazas ya definitiva y ya las vías para los familias descontentas se reducen, aunque algunos no se rinde.
Como los padres de una niña que, hace más de dos años, no consiguió plaza en un colegio concertado de Palma. Acudieron a la conselleria de Educación exponiendo sus sospechas de fraude, pero no lograron nada.
Decidieron llevar el caso a los tribunales, explicando que otros críos sí habían logrado plaza al acreditar enfermedades crónicas (lo que significa un punto más) mediante certificados médicos supuestamente falsos (les parecía muy sospechoso que estuvieran firmados por facultativos no especialistas o incluso por médicos que ni siquiera ejercen en Balears). En concreto, la mayoría acreditaban ser celíacos. Tras años de lucha, la Audiencia ha ordenado ahora a un juzgado de Instrucción de Palma que investigue dichos certificados médicos.
¿Qué da puntos a la hora de lograr plaza en un centro? Tener un hermano en el centro o uno de los progenitores trabajando allí suele ser garantía de plaza.
Por proximidad del domicilio o puesto de trabajo respecto al colegio se pueden conseguir un máximo de 5,5 puntos, según la zona escolar. Palma se divide en cuatro zonas: este curso Educación ha introducido una más para reducir el tamaño y tratar así de que las familias vayan a colegios cercanos a su casa.
Para evitar que sospechosos empadronamientos de último momento puedan tener mucho peso en la baremación, y ante la dificultad de verificar que efectivamente todos los solicitantes están viviendo dónde dicen que están viviendo, Escolarización da más puntos cuánto más tiempo se lleve viviendo en la zona. El nivel de renta es otro de los criterios prioritarios. Obtienen puntuación los hogares con rentas inferiores al triple del salario mínimo.
Entre los criterios complementarios está que el alumno padezca una enfermedad crónica, de un listado especificado por Educación: errores congénitos del metabolismo; artritis reumática juvenil; dolencias digestivas, como la celíaca; fibrosis quística; cardiopatías congénitas; cáncer; nefrológicas como la insuficiencia renal crónica o los transplantados renales; endocrinas, como la diabetes y otras; epilepsia y hemofilia.
Ser miembro de familia numerosa puntúa siempre, en cambio las familias monoparentales solo obtienen más puntuación en los centros que sí lo quieren valorar.
Este supuesto entra en el punto de libre disposición que da Educación a los centros: cada uno puede otorgar un punto entero o fraccionado según una serie de supuestos que pueden elegir, como ser hijo de núcleo monoparental como ya se ha dicho, o que el menor resida en un centro de acogida. La mayoría de concertados y varios públicos suelen otorgar el punto entero a hijos de exalumnos.
Otra novedad de cara al próximo curso es que entre los motivos para dar ese punto o una fracción está el haber asistido a la escoleta en el periodo de cero a tres años ya en ese mismo colegio.
