El conseller de Territorio, Marc Pons, pedirá hoy a la ministra de Fomento en funciones, Ana Pastor, que se supriman los descuentos de residentes en los vuelos entre las islas y en su lugar se apruebe una tarifa plana de 30 euros, una propuesta que consideró "asumible" para el Gobierno central ya que supondría 10 millones de euros. Pons realizó estas declaraciones en el pleno del Parlament en respuesta a Josep Melià, de El PI, quien le preguntó por este asunto.

Resaltó que la tarifa plana será la cuestión más importante que planteará hoy a la ministra ya que este "es el principal caballo de batalla del Govern en transporte aéreo". Añadió que hay ejemplos en Europa de tarifas planas para conexiones aéreas, como el caso de Cerdeña que la tiene establecida para el trayecto entre Milán y Roma.

Por otro lado, el vicepresidente y conseller de Turismo, Biel Barceló, reiteró su defensa de la calidad de las playas de Balears a pesar de haber perdido doce banderas azules e insistió en que, con independencia de la empresa que concede estos distintivos, se realizan controles sobre la calidad de las aguas, por lo que "no tiene sentido pagar a una empresa" por este motivo.

Barceló contestaba así al portavoz de Ciudadanos, Xavier Pericay, quien consideró que las declaraciones del vicepresidente respecto a que la empresa exigía que se le pagara suponen una "grave acusación", ya que "es dar por sentado que esta ONG miente o hace informes a medida, y no hace falta añadir que entre quitar y poner banderas azules hay, según esta acusación, un fajo de billetes". Pericay resaltó que la citada empresa, ADEAC, ha afirmado que no tiene nada que ver "una cosa como otra" y puso como ejemplo a Asturias, que "hace años que no paga y a pesar de eso cada año tiene más banderas azules".

Barceló insistió en que la concesionaria pidió al Govern unos 21.000 euros y el Ejecutivo balear no quiso pagar al considerar que no era un asunto "prioritario", a la vez que admitió que "hace tres años" que el Govern no paga por las banderas azules. Junto a ello, recordó que hay 39 playas de Balears con "distintos certificados como el de AENOR (Asociación Española de Normalización y Certificación" y playas de reconocida calidad como las de Formentera o Es Trenc que no tienen banderas azules.

Por otro lado, el pleno aprobó la moción de El Pi por la que se pedían medidas para luchar contra la venta ambulante ilegal, aunque con enmiendas del PSOE y Més que supusieron rebajar algunas de las cuestiones más contundentes, como la de multar a los compradores. La moción fue aprobada con el voto a favor de PSOE y Més a todos los puntos y del PP y Ciudadanos a la mayoría, mientras que Podemos votó a favor de la mitad de la moción y en contra del resto.

También se aprobó, con la abstención del PP y Ciudadanos y el voto a favor del resto de los grupos, la propuesta del PSOE para instar al Gobierno central a restablecer la "universalidad del derecho a la asistencia sanitaria pública". Asimismo, también a propuesta del PSOE, se aprobó por unanimidad instar al Gobierno central a declarar Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo las aguas de Balears.