La cadena hotelera líder en el mercado español, la mallorquina Meliá, cerró el primer trimestre del año con unos beneficios de 22,3 millones de euros, un 38% más que en el primer tramo del año pasado. Según detalló ayer la empresa en un comunicado, los ingresos crecieron un 8%, hasta los 398,9 millones de euros, mientras se reducía el endeudamiento del grupo y bajaban con fuerza los gastos financieros.

La mejoría se produjo tanto en el mercado nacional como en el internacional. "El primer trimestre del año apunta a una temporada extraordinaria en el ámbito vacacional y muy positiva también en la hotelería urbana en España, que debemos aprovechar para seguir apostando por una mejora cualitativa y de la rentabilidad. En el plano financiero seguimos mejorando nuestra gestión", enfatiza el consejero delegado de Meliá Hotels International y vicepresidente de la compañía, Gabriel Escarrer Jaume.

En el análisis que hacen de los resultados por zonas de actividad, destaca la situación de Canarias y Balears. El archipiélago frente a la costa africana ha sido el destino de mayor éxito durante el invierno, acaparando el 60% del negocio, y beneficiándose del impacto de "la desafortunada situación sociopolítica en destinos alternativos como el norte de África". Y concluido el invierno, la temporada alta mediterránea encumbrará a Balears. "La compañía es especialmente optimista en las islas Balears, donde las renovaciones y el reposicionamiento de los hoteles permitirá beneficiarse de una mejor segmentación y de las mejores condiciones del mercado", apunta Meliá en su nota. En ella destacan el estreno en Mallorca del Meliá Antillas Calviá Beach, "un espléndido hotel que cierra la 'milla de oro' renovada de la playa de Magaluf".

Con todo, Meliá se prepara para seguir mejorando su rentabilidad, que ya creció un 60% el año pasado en destinos como Calviá, y va por el mismo camino. Según documentan, la rentabilidad (medida en RevPar, ingresos por habitación disponible) creció en el primer trimestre un 10,7% en todo el grupo, mientras lo hacía un 21% en el conjunto de sus hoteles españoles y se disparaba un 46% en sus resorts del Mediterráneo. En la cadena mallorquina consideran que los resultados responden en gran medida a la "mejora en los precios", gracias a la contribución de las ventas directas a través de su web.