La sección primera de la Audiencia de Palma volvió ayer por la tarde a rechazar la segunda petición de expulsión del juicio del sindicato de funcionarios Manos Limpias, solicitada por Manuel González Peteers, letrado del acusado Diego Torres. El tribunal tampoco investigará si Miguel Bernad, secretario general de Manos Limpias y en prisión por, entre otros delitos, pedir dinero para retirar la acusación contra la infanta Cristina, falsificó el acta de la reunión de la junta directiva del sindicato donde se acordó la personación como acusación popular en Nóos.

La fiscalía anticorrupción, la abogacía del Estado y las defensas de Iñaki Urdangarin (Mario Pascual) y de la Infanta (Jaume Riutord) se opusieron a la pretensión de Diego Torres al entender, en líneas generales, que no existen pruebas fehacientes o sentencias firmes que demuestren la corrupción y deslegitimación que se atribuye a Manos Limpias.

No obstante, Pascual y Riutord explicaron al tribunal que sería bueno reclamar al sindicato su libro de actas para comprobar si la reunión sobre la personación se celebró o no, como mantiene el diario ABC. Las magistradas también desestimaron esa solicitud y recordaron que en el sumario se hallan el poder notarial de Manos Limpias para personarse, más otros documentos adjuntos, entre ellos el acuerdo de la junta directiva. La sección primera apostilló que el juez Castro dio por buenos en sus días esos documentos.

El tribunal también destacó que no consta la existencia de causa judicial donde se ponga en tela de juicio el acuerdo de personación, ni Manos Limpias ha informado de que tenga dudas sobre el acta. Virginia López Negrete, abogada de Manos Limpias, defendió la corrección de la personación y añadió que no va a tolerar que el letrado de Diego Torres, Manuel González Peteers, vierta contra ella difamaciones.