Todo el mundo da por hecho que Unió Mallorquina es un partido político disuelto y que ya no tiene validez jurídica a causa de los numerosos casos de corrupción que llevó a la Fiscalía a registrar su sede en febrero de 2011. Nada más lejos de la realidad. El partido que lideró durante décadas Maria Antònia Munar sigue vivo. En sus cuentas corrientes tiene la friolera de 180.000 euros que, evidentemente, no pueden tocarse porque están judicialmente intervenidos desde hace más de cinco años.
Es curioso comprobar cómo en el registro de partidos políticos del ministerio del Interior aún está Unión Mallorquina como "formación política de ámbito de la isla de Mallorca". Como últimos responsables figuran el que entonces era presidente, el actual diputado de El Pi Josep Melià, y el teniente de alcalde de Santa Margalida, Joan Monjo, como secretario general. Ambos presentaron la dimisión para crear Convergència per les Illes.
Para la disolución del partido era preciso que, o bien un tribunal dictara una resolución ordenando disolver o que fuera la propia formación la que decidiera su desaparición administrativa y jurídica. Ninguna de las dos cosas ha sucedido. El juez solo ordenó la intervención de las cuentas bancarias. Mientras que para disolver el partido de forma voluntaria debería convocarse un congreso extraordinario, según los estatutos. Por consiguiente, si UM quisiera volverse a presentar a unas elecciones está en condiciones de hacerlo.
Es más, ha habido reuniones informales de miembros de la ejecutiva, algunos están dimitidos y otros no, y han hablado de esta cuestión y de que UM sigue viva. "Cinco años después del registro judicial que obligó a cerrar a Unió Mallorquina no se ha sabido nada más del tema. Se aplicó la pena mediática", apuntaba un miembro de la entonces ejecutiva de la formación uemita. En estos encuentros informales de miembros de los órganos del partido también se ha hablado que los casos de corrupción son responsabilidad de los que los cometieron, empezando por la mismísima Maria Antònia Munar, y no el partido. ¿Quien lo iba a decir? UM no está disuelta, sigue viva.
El expresident Soler quiere un Junts pel Sí a la mallorquina
El expresident del Govern con el PP, Cristòfol Soler, está trabajando a destajo, sin mucho éxito hasta ahora, para impulsar una operación al estilo de Junts pel Sí de Cataluña para las generales. Habla de una candidatura con personas independientes que esté apoyada por todas las formaciones políticas regionalistas y nacionalistas de Balears. Sin embargo, la más que probable coalición de Més con Podemos ha truncado sus planes. El pasado viernes no escondió su disgusto mientras hablaba con el vicepresidente Biel Barceló, líder de Més: "Los que no queremos apoyar a un partido de ámbito estatal no tenemos a quien votar en estas elecciones", le recordó. Se quejó de la poca predisposición de Més de su iniciativa al estiló catalán. Dirigentes de Més recordaron que Soler "hasta hace poco todavía estaba afiliado al PP". Biel Barceló, por su parte, le comentó que el experimento de Unitat "fue un fracaso".
Verger repetirá como candidato de Més en la coalición con Podemos
Toni Verger ha dado el visto bueno a David Abril y Bel Busquets. Será el hombre de Més para integrar la coalición a las generales con Podemos y Esquerra Unida. En un principio se creía que Verger no querría presentarse, tras no alcanzar el diputado en los comicios del pasado mes de diciembre. No obstante, tras la decepción de diciembre ha llegado la ilusión de la posibilidad de sacar el tercer diputado con los podemitas.
Podemos, Més y PSOE se van de tertulias radiofónicas juntos
Tal vez la cercanía de las elecciones ha hecho que en los últimos tiempos los partidos del Pacto muestras una sintonía inesperada. Ayer Laura Camargo (Podemos), David Abril (Més) y Andreu Alcover (PSOE) se fueron de tertulia radiofónica juntos. Los del PP, Pi y Ciudadanos van por su cuenta.
