La abogada de Manos Limpias, Virginia López Negrete, aseguró ayer haber recibido una oferta económica para renunciar a ejercer la acusación popular contra la infanta Cristina, aunque rehusó dar más detalles alegando que debe guardar silencio debido a su secreto profesional. Negrete, al hilo de una información que le vinculaba con una sociedad en Panamá, insistió en que existe una campaña de desprestigio contra ella para forzarla a renunciar a ser acusación en Nóos y conseguir que la infanta doña Cristina quede exculpada de los dos delitos fiscales que se le atribuye-López Negrete ha vivido una semana de infarto tras la operación policial y judicial contra Miguel Bernad, secretario general de Manos Limpias, y Luis Pineda, dirigente de Ausbanc, en prisión preventiva, por, entre otros delitos, pedir tres millones de euros a dos bancos y a los abogados de la hermana del Rey por retirar la acusación contra ésta.
La letrado ha decidido seguir como acusadora particular, pero no descarta abandonar si la presión se vuelve insoportable. La abogada se ha desmarcado de Miguel Bernad y ha explicado que su cliente es el sindicato de funcionarios, que sigue teniendo capacidad jurídica para ejercer la acusación popular.
Por otro lado, los abogados de Diego Torres, Iñaki Urdangarin y Mercedes Coghen pidieron, sin éxito, a la Audiencia que expulsara del juicio a Manos Limpias por las sospechas de corrupción que pesan sobre algunos de sus dirigentes.
Negrete atribuyó a la supuesta campaña de intoxicación contra ella una noticia
sobre que ella o su socio o su despacho tengan una cuenta en Panamá. La letrado desmintió tajantemente la información.
