El Govern acordó ayer el inicio del expediente de contratación de las obras necesarias para la puesta en funcionamiento de las nueve líneas de producción de la desaladora de Palma, con la recuperación de las tres líneas que en la actualidad no están en condiciones de ser utilizadas por falta de mantenimiento. El conseller de Medio Ambiente, Vicenç Vidal, explicó que la infraestructura podrá estar a pleno rendimiento en verano, lo que permitirá garantizar el abastecimiento a Palma cuando se produzca un incremento notable de la población flotante a causa de la llegada masiva de turistas.

"Las obras serán rápidas", aseguró el conseller. Con un presupuesto máximo de 1.040.797 euros, está previsto que comiencen en junio, de tal manera que en julio y agosto la desaladora pueda funcionar en todas su capacidad. Precisó que con la puesta en marcha de la desaladora de Andrax y el pleno rendimiento de la de Alcudia se podrá paralizar un tiempo la de Palma para estas actuaciones.

Con las tres nuevas líneas, la infraestructura de Palma ganará un 35 por ciento de capacidad de producción. Además, Vidal resaltó que la Conselleria está trabajando con los Ayuntamientos para mejorar la eficacia de sus redes. En este sentido, admitió que si bien en Palma el suministro de agua está garantizado, esta seguridad no existe en donde "no hay las infraestructuras" necesarias, como en el Llevant.

Vidal recordó la situación de prealerta por sequía hidrológica, con unas reservas hídricas que en Mallorca están al 50 por ciento, mientras que el pasado año en las mismas fechas se encontraban al 65 por ciento. La falta de lluvia ha hecho que las reservas "no se recuperen lo que sería deseable" y que todas las islas estén peor que hace un año. En Menorca, las reservas hídricas se encuentran al 69 por ciento y en Eivissa es donde se produce una situación más preocupante, con las reservas al 47 por ciento.

La portavoz del Govern, Pilar Costa, explicó que el Ejecutivo se ha puesto en contacto con el ministerio de Medio Ambiente para que se desbloqueen las desaladoras de Ciutadella y Santa Eulària y la depuradora de Eivissa, pendientes ya solo de firmar el convenio para que se traspasen al Govern. "Sólo queda dar este paso y es urgente porque el verano está a punto de empezar y no podemos esperar a que se forme un nuevo Gobierno", declaró Costa.