El pleno del Parlament ha aprobado la toma en consideración de la Proposición de Ley para modificar la Ley balear de protección de animales con el fin de prohibir en las islas las corridas de toros, correbous como el de Fornalutx y espectáculos que supongan tortura y sufrimiento a los animales. La propuesta ha salido adelante con el respaldo de PSOE, Més y Podemos, el voto en contra del PP y Ciudadanos y la abstención de El Pi.

Los partidos del Pacto han argumentado que, 24 años después de la aprobación de la Ley balear de protección animal, la sociedad ha cambiado y no tenía sentido las excepciones contempladas en la normativa. Además, han considerado que Balears será una "sociedad mejor" cuando no esté permitido que un animal sufra por motivos lúdicos apelando a "la tradición y la cultura".

Desde el PP, Ciudadanos y El Pi han considerado que la nueva normativa entrará en colisión con la legislación estatal y que además "permite un amplio margen de interpretación", de tal modo que por ejemplo "si no se introducen excepciones tendrá que cerrar uno de los delfinarios más importantes de Europa", según el popular Miquel Jerez.

Para Jaume Font, de El Pi, la propuesta del Pacto obedece más a motivos políticos que a la protección animal, ya que se centra solo en los espectáculos taurinos, sin entrar por ejemplo en lo que ocurre con "las mascotas".

Xavier Pericay, de Ciudadanos, ha incidido en que la propuesta choca con la legislación básica estatal, por lo que "no tiene posibilidad de prosperar cuando traspase las paredes del Parlament y vuelva a la realidad".