-Para que se haga cargo del tipo de entrevista: "¿Por qué odia tanto a Mallorca?"
-La amo, y he vivido en las cuatro islas, pero lo que no es problemático para los mallorquines puede serlo para los menorquines. Por ejemplo, el desplazamiento de enfermos a Son Espases. Los menorquines nos sentimos ciudadanos de segunda respecto de Mallorca.
-Ni siquiera hablan ustedes de Balears, sino de la "nació de Menorca".
-Antes que de Balears, prefiero hablar de Mallorca, Menorca, Eivissa y Formentera. Defino a Menorca como mi patria íntima y mi nación afectiva, la cultural son los Països Catalans y la política es la Comunidad Autónoma.
-La destitución de la menorquina Esperança Camps
-Dimitió, y fue un momento doloroso que intentamos evitar hasta el último minuto. Nos gustaría que Camps hubiera continuado, porque es una persona querida en Menorca, pero no pudimos gestionar los tiempos.
-¿Camps le calentaba la silla a Maite Salord hasta que dejara el Consell de Menorca?
-En absoluto, es falso. Salord es la candidata de Més per Menorca, y no vino a Palma a resolver la situación como presidenta del Consell, sino como líder del partido. Sin ninguna intención de influir o determinar al Govern.
-Camps y Salord, los terribles celos entre escritores.
-Se respetaban como escritoras, pero teníamos una relación que iba más allá de la política, y ahora está herida. Se recuperará, somos adultos y lo personal está por encima.
-La sustituta Ruth Mateu
-No buscamos tanta pureza. Es menorquina, su familia es conocida en la isla y sabrá defender los intereses de Menorca. Ya fue secretaria general a propuesta de nuestra coalición. Mateu era nuestra candidata.
-Incendiaron ustedes un problema interno
-No era nuestra intención, pero no controlamos la situación. Para trabajar en una conselleria se necesita empatía y complicidad. Ese clima se deterioró y no funcionaba. Intentamos mediar y pusimos las bases del cambio, pero las cosas se precipitaron.
-¿Se arrepiente del comunicado de Més per Mallorca
-Tal vez no estaba bien comunicado. Més per Menorca es signataria del Pacte y en un Govern plural ha de visualizarse la presencia de nuestra formación. En 2007, tres diputados de UM se visualizaron con tres conselleries para UM. Cultura forma parte de nuestra cuota, nos representa. Como ves, no reniego de las cuotas, Bauzá también las tenía.
-¿Por qué los transparentes partidos de izquierda no han publicado el documento con el reparto de cargos?
-No hay un documento, se discutió la estructura de las conselleries y cómo se iban a ocupar los cargos.
-Pensábamos que Més era una unidad.
-Son dos proyectos diferentes pero concluyentes. La misma semilla da distinto fruto si crece en realidades distintas. En Menorca somos más insularistas, para los menorquines era importante contar con una presencia diferenciada en el Parlament.
-No sé si les conviene que se sepa que el voto de un menorquín vale por cinco votos mallorquines.
-Si fuera por población, Menorca, Eivissa y Formentera serían innecesarias. Se buscó un equilibrio entre población y territorialidad. Si no se comprende esta realidad, será difícil crear una comunidad. El problema de un menorquín debe ser el problema de un mallorquín.
-Hizo usted activismo homosexual desde su primer discurso en el Parlament.
-Forma parte de mi discurso político, de ahí que en estos momentos impulse una ley contra la homofobia. Junto a otros diputados, pero yo lo defiendo con más emoción porque lo he vivido personalmente.
-¿Preferirían ustedes ser Eivissa?
-En Més per Menorca preferimos el modelo de Menorca, la "vía menorquina de crecimiento" es muy distinta de la ibicenca
-Los universitarios menorquines seguirán estudiando Medicina en Barcelona.
-La mayoría de menorquines eligen hoy cursar estudios universitarios en Barcelona. La situación no cambiará con la facultad de Palma, pero es una opción adicional. Aunque tenga retornos más inmediatos para Mallorca, apoyamos Medicina para apostar por la innovación y porque Son Espases también es el hospital de referencia de Menorca.
-¿Hay más mallorquines que no han visitado Menorca o viceversa?
-No evito la respuesta, pero es mínimo el número de ibicencos y formenterenses que han visitado Menorca, y viceversa. Las islas menores están muy incomunicadas.
-¿El tamaño importa?
-Es importante, pero no debería ser decisivo.
