El alumnado de Secundaria y Bachillerato de Balears respondió a la convocatoria del Sindicato de Estudiantes y hasta 6.000 estudiantes del archipiélago (el 16% de los alumnos de entre 3º de ESO y 2º de Bachillerato) no acudieron a clase ayer para mostrar su rechazo a la LOMCE y al modelo universitario conocido como 3+2, que introduce la posibilidad de reducir la duración de los grados un año, pasando de cuatro a tres, y ampliar los másteres (más caros) de un año a dos. En Palma tuvo lugar una manifestación que congregó a centenares de jóvenes que marcharon sin incidencias desde la conocida como 'plaza del tubo' hasta la sede de la conselleria de Educación. Una vez allí, el director general de Planificación, Ordenación y Centros, Antoni Morante, bajó y estuvo hablando con varios portavoces de los estudiantes sobre sus reivindicaciones.