Sin la preceptiva autorización de la Delegación del Gobierno, pero con todos los parabienes del Ayuntamiento de Palma, que se esforzó especialmente en dar proyección a la cita e incluso llegó a cortar el tráfico rodado en la plaza, alrededor de 250 personas celebraron ayer el 85 aniversario de la proclamación de la II República con una concentración festiva en Cort en la que hubo poesía, música y la lectura de un manifiesto reivindicativo.

La celebración republicana tuvo dos diferencias significativas con respecto a años anteriores: la importante presencia institucional y los vítores unánimes de los presentes a la aprobación del proyecto de demolición del monolito de sa Feixina.

En el acto no sólo estuvo representado el equipo de gobierno de Cort con su teniente de alcalde de Urbanismo a la cabeza, Antoni Noguera, sino también la segunda autoridad de Balears, la presidenta del Parlament, Xelo Huertas, que se dejó ver junto a otros diputados de Podemos, como el portavoz Alberto Jarabo o Baltasar Picornell. Més también contó con representantes en la concentración. Además de Noguera estuvo presente el portavoz parlamentario David Abril o la concejal y portavoz del equipo de Gobierno de Cort, Neus Truyol. Y Esquerra Unida contó con su coordinador Manel Carmona en una concentración en la que destacó la presencia de históricos de la izquierda balear como Lila Thomàs, Manolo Cámara o Miquel Rosselló.

La presentadora del acto, la presidenta de la asociación Memòria de Mallorca, Maria Antònia Oliver, felicitó a Cort por la aprobación del proyecto de demolición de sa Feixina al principio del acto, consiguiendo una sonora y espontánea ovación de la parroquia. "Seguimos luchando por derribar sa Feixina, por abrir las fosas, por profundizar en el proceso democrático y por acabar con la impunidad", subrayó, para cuestionar acto seguido que los partidos que no apoyan el derribo del monumento puedan llamarse democráticos.