La portavoz parlamentaria del PP, Marga Prohens, afirmó ayer que la crisis de Govern con la dimisión de Esperança Camps como consellera de Transparencia demuestra que la presidenta Francina Armengol "gobierna, pero no preside", ya que es "esclava de un Govern que es un reino de taifas". Para Prohens, lo ocurrido ha puesto en evidencia el "nulo liderazgo" de la jefa del Ejecutivo, quien está "atada de pies y manos" por Més, socios de gobierno del PSOE.

Precisó que "Armengol es una presidenta que tiene que esperar a que Més per Menorca autorice la marcha de la consellera Camps y ahora a que le proponga el nombre del nuevo conseller". Añadió que eso supone "robar a la presidenta una de las funciones que le otorga el Estatut d'Autonomia, que es el nombramiento y cese de sus consellers", ya que Armengol "se limita a ratificar los nombramientos que le vienen por cuotas".

"La presidenta no puede nombrar a quien considere mejor", insistió Prohens para quien esta situación es la consecuencia de "gobernar por cuotas de poder y sin una visión conjunta de Govern". Además, afirmó que los partidos del Pacto "han fracasado en la bandera" de la transparencia y "en lugar de avanzar en esta materia, se ha dado pasos atrás", demostrando la "inutilidad" de lo que a su juicio es "una Conselleria cuota".

Junto a ello, recordó que cuando Armengol lideraba la oposición en la pasada legislatura criticaba que el Govern del popular José Ramón Bauzá hubiera tenido tres consellers de Educación y tres de Salud. Ahora, Transparencia tendrá a su segundo conseller de la legislatura, pero Prohens se mostró convencida de que será sustituido el próximo año por la presidenta del Consell de Menorca, Maite Salord.

Bel Busquets, diputada de Més y secretaria general del PSM de Mallorca, admitió que en el Govern que integran PSOE y Més "hay un cierto reparto" de cuotas, lo que consideró lógico al tratarse de un Ejecutivo formado por varios partidos en una Comunidad Autonóma que además está formada por distintas islas. Sin embargo, consideró que esto también sucede en los gobiernos "monocolor" y como ejemplo puso al anterior Govern de Bauzá, con cuotas de "rodriguistas y bauzanistas". Añadió que en el actual Govern "no existen capillitas" y que el Ejecutivo está "muy cohesionado". Según la secretaria general del PSM, entre los consellers de Armengol "hay un buen feeling".

Tras asegurar que las relaciones entre Més per Mallorca y Més per Menorca son "muy buenas" y "sin tiranteces", insistió en que será Més per Menorca el que decidirá quién sustituirá a Camps y "por deferencia" informará de su decisión a Més per Mallorca. A la pregunta de cuál es el papel de Armengol en la decisión sobre el futuro conseller, dijo que la presidenta es "quien lo nombrará".

La portavoz parlamentaria del PSOE, Pilar Costa, recordó que la crisis en la conselleria de Transparencia no se debió a diferencias entre PSOE y Més, socios del Govern, ya que se trata de una Conselleria gestionada sólo por Més.

Costa eludió pronunciarse sobre los "bailes de nombres" para sustituir a Camps y afirmó que le corresponde a Armengol decidir si quiere hacer una remodelación del Govern más amplia, sustituyendo también al socialista Joan Boned, de baja por enfermedad.

La portavoz parlamentaria de Podemos, Laura Camargo, afirmó que Podemos ve esta crisis de Govern "desde fuera" ya que no pertenece al Ejecutivo y corresponde a PSOE y Més resolver la situación, aunque mantienen informado a su partido. "Esperemos que se resuelva rápido y que la crisis no se cierre en falso", concluyó.