-¿Cuál es el motivo de su conferencia sobre vacunaciones y mujeres embarazadas?
-Pretendo dar una visión general sobre un asunto que genera mucho miedo entre las embarazadas y dar a conocer lo novedoso sobre la seguridad de estos antídotos. En la mayoría de las vacunas existe una evidencia de que la seguridad es muy alta y que, en general, estos medicamentos entrañan más beneficios que riesgos para las mujeres en estado de gestación. Y además con ellos estamos protegiendo no solo a la mujer sino también al feto.
-¿Qué vacunas recomendaría a una embarazada?
-En primer lugar, la de la gripe. Y en todos los trimestres del embarazo. Está comprobado que las embarazadas que están vacunadas contra este virus estacional tienen menos abortos que las que no lo están.
-¿Por qué?
-Porque la gripe es una enfermedad que en las embarazadas tiene más riesgo de desarrollar complicaciones. Además, los anticuerpos de la madre pasan al bebé, que queda protegido hasta en un noventa por ciento. En los lactantes la gripe se manifiesta de forma más grave y hay que recordar que a los niños no se les puede vacunar hasta los seis meses de edad.
-¿Qué otras vacunas recomendaría ponerse a una mujer que espera un hijo?
-La de la tos ferina, que es una enfermedad que ha experimentado un repunte en los países occidentales de nuestro entorno.
-¿A qué es debido este mayor número de casos de tos ferina?
-Básicamente porque ni la vacuna ni la enfermedad protegen totalmente. Es una buena vacuna, aunque tiene sus carencias.
-¿Por qué la recomienda entonces?
-Porque un vacunado no puede enfermar ni trasmitir la enfermedad, motivo por el que se ha decidido vacunar a las embarazadas en el tercer trimestre de gestación, por cuestiones de eficacia. Así, el bebé ya nace protegido y lo está durante los dos o tres primeros meses de su existencia.
-Recientemente se dieron varios casos de bebés fallecidos a consecuencia de la tos ferina...
-Sí. En los niños mayores se manifiesta como una enfermedad molesta ya que se pueden pasar tres semanas tosiendo, aunque no reviste gravedad. Sin embargo, en los niños pequeños esta infección sí puede llegar a ser mortal.
-Sígamos con las vacunas que recomienda a las gestantes...
-La del tétanos. Bueno, en realidad tan sólo hay que controlar que la mujer esté convenientemente protegida frente a esta bacteria.
-¿Por qué?
-Porque el tétanos es una enfermedad que nunca va a desaparecer ya que está provocada por una bacteria que es ubicua. Está en todas partes, en el hierro, en las heces, en la tierra... Una simple caída en el campo puede provocarte la infección.
-Ha dicho que hay que controlar que la embarazada esté bien protegida. ¿Cuándo hay que vacunarse contra el tétanos?
-A los dos, cuatro y seis meses, a los 18 meses y a los seis y 14 años. También se pone un último recuerdo entre los 50 y los 65 años. No hay que olvidar que la mortalidad por tétanos en un adulto sano, no vacunado lógicamente, es de hasta un 15% de los casos. Y con un tétanos neonatal fallecen el 80% de los bebés. Afortunadamente desde 1997 no se ha registrado en el país ninguna muerte de un bebé por esta causa.
-¿Y antes eran muy frecuentes?
-Se daban en los alumbramientos en malas condiciones higiénicas, cuando se paría en casa o en otras circunstancias. Por eso es tan importante supervisar que la embarazada esté bien protegida, porque un accidente es siempre imprevisible. Hay mujeres que tienen que parir en situaciones inesperadas, por ejemplo en un taxi cuando se dirigen al hospital.
-¿Qué otras vacunas aconseja?
-En circunstancias concretas recomendaría también la vacuna contra la hepatitis A y B, la del meningococo C y la de neumococo. Pero no para todas las embarazadas, sino solo para aquellas que padezcan una enfermedad de base que así lo aconseje.
-¿Y si van a viajar a un país exótico con alguna enfermedad aún no erradicada como aquí?
-También recomendaría que se protegieran contra la polio, la rabia o la fiebre amarilla. Si por ejemplo están en la India y les muerde un perro, les aconsejaría que se vacunaran contra la rabia lo antes posible, allí mismo antes de regresar si pueden hacerlo.
-Por último, ¿qué vacunas les prohibiría a las embarazadas?
-Todas las que contienen virus vivos que, en realidad, están contraindicadas para este tipo de pacientes porque provocan una pequeña infección artificial en las personas que se las ponen.
-¿A cuáles se refiere?
-A la triple vírica que protege contra el sarampión, la rubéola y las paperas y a la vacuna contra la varicela. Con estos antídotos hay un riesgo teórico claro aunque no se han descrito muchas complicaciones por ellas. En realidad a las embarazadas no se les ponen por prudencia y ya deberían estar vacunadas antes de quedarse embarazadas.
-¿Y si no lo están?
-Tendrán que esperar a vacunarse después de haber alumbrado a su hijo.
