Miró sustituye a Dalí. El antiguo Hotel Dalí de tres estrellas cerró sus puertas para dar paso al primer, único y exclusivo Hotel Joan Miró Museum que suma una estrella más. El nuevo concepto de hotel, inspirado en el artista Joan Miró, fue inaugurado durante la tarde de ayer en la barriada de Cala Major. "La cultura vuelve a este barrio con fuerza, exclusividad y con la unión que hacemos la familia Vich y la familia Miró", subrayó el nieto del conocido artista y presidente de la Associació Successió Miró, Joan Punyet.

La idea de un hotel inspirado en el artista fue fruto de un acuerdo exclusivo firmado entre la propiedad, la Successió Miró, la Fundació Pilar i Joan Miró y el Ajuntament de Palma. Javier Vich, miembro de la familia propietaria, explicó durante la inauguración que se ha llevado a cabo una reconversión de la infraestructura, con una inversión de dos millones de euros. Ahora el "hotel-museo" cuenta con habitaciones tematizadas y espacios comunes decorados con obras del pintor Joan Miró. Cada una de las 97 habitaciones cuenta con un vinilo mironiano y están decoradas ad hoc. Un total de 28 obras entre grabados y litografias del artista y 104 vinilos han sido incorporados al hotel.

La nueva concepción de hotel empapada de arte, según Punyet, está a la altura de grandes ciudades como Nueva York, París o Roma, pero "el destino pertenece a los atrevidos y vamos a hacer que este barrio al menos tenga la apuesta más importante por la belleza y por la cultura". El nieto del artista afirmó que la gente mata por tener un Hotel Joan Miró, pero nombrando a su abuelo subrayó "el mundo es para los valientes y hay que apostar por la cultura en lugares degradados".

Cala Major es un barrio degradado, olvidado. Según Punyet, este hotel destacado por su belleza, poesía, y cercanía a la fundación Miró y a Marivent "es una apuesta de la que mi abuelo hubiera sido partícipe". El presidente de la Associació Successió Miró explicó que nunca hay que ir a lo fácil, que sería apostar por un Museum París, Barcelona o Nueva York. "Hay que ir donde está la necesidad máxima de apostar por la cultura y por la belleza", añadió Punyet. Remarcando el trabajo y dinero en este proyecto, el nieto del artista quiso añadir que la ubicación del hotel es complicada por la degradación del barrio, pero al mismo tiempo, permite ir a los huéspedes a pie a la fundación y disfrutar de un elenco de posibilidades único en el mundo.

Obras expuestas

Las obras que se pueden observar en el "hotel-museo" son de la colección particular de Punyet Miró y pertenecen a la serie Allegro Vivace, Les Montagnards, Gents de la Mer, L'Aïeule des 10.000 Âges, la Cantatrice Chauve y L'ceil Bleu du Volcan. "Las he restaurado, las hemos enmarcado y las hemos elegido para hacer una apología a un "mundo Miró" y mediterráneo. Miró llegó a Mallorca el años 1956 y vivió aquí los últimos 27 años de su vida, hasta que falleció en 1983. Principalmente, según el presidente de Successió Miró, son gráficos hechos en París, en Barcelona y en Mallorca, que tienen que ver con el mediterráneo, el color, el sol, la luna, la música, la poesía, el misterio y hablan también de gente del mar. Sale también la viuda del corsario, el pirata, el guardián del faro.

La palabra "Museum" fue remarcada en repetidas ocasiones por Punyet quien explicó que para él este hotel es tan importante como presentar una exposición de las obras en un museo. "Lo he hecho con toda mi alma", añade el nieto del artista quien, personalmente, ha redactado un texto para cada obra que explique al turista que tipo de visión tenía su abuelo cuando al realizar los gráficos.

Cambio de clientes

"Históricamente, en este hotel, antes Dalí, hemos experimentado un mercado alemán escaso, por no decir que no hemos tenido casi nada de alemanes y muchísimo menos suizos, a pesar de su ubicación", afirmó Javier Vich, miembro de la familia propietaria del hotel.

Vich señaló que con esta nueva marca y las nuevas 4 estrellas Joan Miró, están experimentando un cambio drástico en toda la segmentación de mercado y esperan un aumento a medida que vaya llegando la temporada. Este cambio, según Vich, viene motivado por un incremento de mercado alemán, suizo y de austriaco. "El que más sorpresa nos ha llevado es alguna reserva del mercado asiático", añadió.

Todo apunta a que la marca Joan Miró es conocida y que atrae a un público con el que antes el hotel no contaba. "La barriada es el gran caballo de batalla que esperemos que entre la ayuda de todos podamos ir trabajando para que la zona se vaya reconvirtiendo", explicó Vich.

"Si hubiera querido dinero no me hubiera centrado en Cala Major", explicó el nieto de Miró. "Lo he hecho por amor al arte", añadió Joan Punyet.