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Entrevista

Miguel Cañellas: "Si quisieran inventar una pastilla que deprimiera más que el alcohol no lo conseguirían"

"Empecé como cualquier joven. No hacíamos botellones, pero bebíamos al salir de clase"

Mica Cañellas, impulsor de la asociación de Las Ovejas de Mica, posa en la redacción de este diario.

-¿Cómo un joven puede convertirse en alcohólico?

-Yo empecé como cualquier joven. No hacíamos los famosos botellones, pero sí bebíamos mucho los viernes cuando salíamos del colegio. Trabajar los fines de semana en discotecas también influyó.

-¿Cuándo se dio cuenta de que sufría una enfermedad?

-Una cosa es el abuso de alcohol y la otra es el alcoholismo. Te das cuenta de que eres alcohólico cuando tienes consecuencias. Si tú bebes y no sufres las consecuencias, no eres alcohólico. Las conductas que adoptas marcan la diferencia. Los principales comportamientos que definen esta enfermedad son cuatro: dependencia, tolerancia cada vez mayor, pérdida de control y dejar de hacer cosas con los tuyos.

-¿Por qué decidió dejar de beber?

-Durante 25 años no hubo manera de querer cambiar el chip. Ponía una resistencia enorme. Mi familia sufrió mucho y decidí dar el paso. Me resultó muy difícil porque el alcohol es un gran depresivo, como ninguno. Te llega a convertir en sedentario, apático, dejas de emprender, pierdes la ilusión por todo...

-¿Lo compararía con otras drogas?

-Para mí es la más fuerte, sin duda. Lo que también es la más social, tradicional y la más aceptada. Ha llegado un momento que hemos normalizado el alcohol, pero es un gran depresivo. Siempre he dicho que si quisieran inventar una pastilla que deprimiera más que el alcohol no lo conseguirían.

-Con todo lo vivido,¿cree que un joven de dieciséis años que bebe puede estar enfermo?

-No. Pero puede ser un futuro alcohólico. Por cuatro borracheras no enfermarás, pero puede ser el principio. El alcoholismo es un proceso y los que empiezan pueden terminar enfermos en unos tres o cuatro años si siguen bebiendo de manera descontrolada.

-¿Qué otras tipologías de alcoholismo aparte del botellón están de moda?

-Hay dos que me preocupan más que las demás. Una es el alcoholismo femenino. Son mujeres mayores que no han bebido nunca y ahora empiezan a beber en sus casas para combatir la depresión. Me preocupa porque es muy difícil de detectar y desatan accidentes domésticos. El otro tipo de consumo es el de los frikies. Mucha gente bebe delante del ordenador y se encierra en su habitación. Los padres suelen estar tranquilos porque su hijo está en casa. Pero el alcohol te provoca muchas locuras.

-¿Ya se siente totalmente recuperado?

-Me siento perfecto. Sentirse sano es como aterrizar en otro planeta. De ahí el nombre de mi asociación, Las Ovejas de Mica, porque para mí ver las ovejas son la naturaleza, el campo. Yo resucité, sí.

-¿En qué momento se sintió con las fuerzas suficientes para empezar con este proyecto?

-Yo no quería montar una asociación. Empecé con una página de Facebook para hablar con otros alcohólicos y así no olvidarme de lo que había vivido. Pensaba que interactuaría con muchos alcohólicos, pero lo que realmente pasó es que la gente me empezó a preguntar y a pedir consejo.

-¿Cómo nació la asociación?

-Me junté con un amigo que hizo el programa conmigo y montamos el centro hace ya cinco años. Al principio no contábamos con un centro, pero empecé a tener demanda y lo llegamos a montar. Entre 30.000 y 40.000 personas nos pidieron ayuda a través de la página de Facebook.

-¿Por qué el nombre de Las Ovejas de Mica?

-Fue cosa de mi hermana. Estaba escribiendo un libro que se llamaba Quiero ver las ovejas, porque quería ver la naturaleza, volver a ver las cosas. Mi hermana me ayudó a abrir la página, le puso este nombre y quedó aquí.

-¿Se podría comparar con Proyecto Hombre?

-No. Proyecto Hombre tiene una estructura muy grande y empezaron a tocar todas las drogas. Yo me centré en el alcohol como detonante. Y lo hice así porque los tiempos han cambiado. Ahora no hay alcohólicos puros. El alcohol dispara y después los adictos consumen otras drogas. Pero todo centro que ayuda para mí es muy respetable.

-¿Cuánta gente se ha recuperado gracias a su asociación?

-El problema es que no todos terminan los programas. De los que acaban, entre un 80 y 90 por ciento no vuelven a beber nunca más. Eso sí, si acaban y cambian las conductas y hábitos.

-Explique uno de los métodos que se utilizan en su asociación.

-Hablar muy claro. A mí me dicen que hablo muy claro y muy directo. Lo primero es que nosotros los alcohólicos nos creemos la hostia y realmente somos unos cobardes. Nosotros nos creemos nuestra propia mentira y yo me creía un artista de Rock & roll. Empiezan a reaccionar cuando les digo que son una mierda de tíos y que todo lo que han hecho mal. Mi método es decir las cosas claras a la cara.

-¿Cómo se financian?

-Los primeros años nos ayudaron pequeños empresarios amigos. Cobrábamos una cuota que solo la pagaban los que podían. Pero esto creó un conflicto. En 2013 cambiamos. Ahora se cobra una cuota a todo el mundo pero tengo el compromiso de no cobrar a alguien que no tenga dinero para darle terapia. Todos pagan una parte proporcional a sus ingresos.

-¿Ninguna entidad ha confiando en ustedes para financiarles?

-Nunca hemos recibido una subvención fuerte de nadie, los únicos que han confiado en nosotros ha sido La obra social La Caixa. El año pasado hicimos una campaña en los ayuntamientos de toda Mallorca y este año, gracias a ellos, hacemos una campaña en las escuelas, pensada para jóvenes de entre 13 y 17 años.

-¿Han encontrado algún caso que necesite ayuda en los colegios?

-Lo que nos hemos encontrado en las escuelas es muy curioso. Los niños me preguntan cosas para sus padres. Tenemos la manía de juzgar a los jóvenes pero está viniendo una generación más centrada y deportista y que parece que va a cambiar todo esto. No me gusta meter a todos los jóvenes en el mismo saco.

-¿Qué puede hacer Las Ovejas de Mica por la gente que no se atreve a dar el primer paso?

-Nosotros atendemos a la gente el primer día que viene. Además, los voluntarios que trabajan con nosotros han sido alcohólicos. De este modo podemos entenderlos mejor que otros. Los miércoles tenemos terapias familiares gratuitas. Pueden venir a pedir toda la ayuda que quieran. Incluso si el perfil no encaja, nos encargamos de buscar otros centros.

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