Diego Torres no supo ayer, a petición de la abogada del Govern balear María Ángeles Berrocal, explicar por qué el Instituto Nóos pagó facturas de cientos de miles de euros a empresas suyas y de Iñaki Urdangarin por conceptos tan ambiguos como "dirección o "logística" de los foros Illes Balears, que fueron sufragados por el Ejecutivo con 2,3 millones de euros.

Torres insistió en su táctica de no reconocer la autenticidad de algunas facturas de Nóos que obran en el sumario y admitir únicamente como válidos los gastos que él ha contabilizado en un informe particular. "Cogimos dos archivadores que ponía Valencia Summit e Illes Balears Forum. Son facturas verdaderas y responden a servicios prestados por los foros", explicó Torres sobre la documentación que entregó al juez Castro en 2010.

"No puedo acordarme de todas las facturas si no están en mi informe justificativo de los gastos. No le respondo. Si no me dice en qué folios está de los informes de costes. Si me pregunta sobre documentos que no he analizado no le voy a responder", se enfrentó a la letrada del Govern.

"Señor Torres, usted no puede dirigir el interrogatorio", cortó Samantha Romero, la presidenta del tribunal, que ayer tuvo que intervenir en numerosas ocasiones para calmar a las partes y al acusado. "Hubo una aportación de esos archivadores a requerimiento del juez y sin analizar su contenido. Si quiere marearme, no le voy a responder", insistió el declarante.

"Usted no puede dirigir el interrogatorio, nadie quiere marearle", zanjó Samantha Romero.

"Las pruebas periciales tienen su momento en este juicio. Esa pericial está propuesta y usted está en su derecho a no declarar", insistió la presidenta.

Berrocal le interrogó sobre los trabajos y servicios que justificaban pagos de decenas de miles de euros con fondos públicos, pero Torres replicó con sus prolijas explicaciones que no aclaran nada. "El señor Carballido era un empleado de Torres Tejeiro y la sociedad factura al Instituto Nóos. Si no lo hubiésemos hecho así habríamos tenido una inspección de Hacienda y un problema gordísimo".

Destacó una factura de 200.000 euros de Aizoon a Nóos por logística del Illes Balears Forum 2005. Las acusaciones mantienen que Urdangarin y Torres se repartieron los beneficios de los foros, que costaron mucho menos que el dinero pagado por las Administraciones Públicas. "El señor Urdangarin trabajó un montón de horas para ese proyecto, varios consultores de Aizoon también trabajaron un año en la preparación de ese proyecto", se explaya el acusado.

"Esta factura se pagó por el Instituto Nóos a Nóos Consultoría (la consultoría particular de Urdangarin y Torres) por diseño del proyecto y recoge la dedicación al proyecto de 16 personas, no de toda la plantilla de Nóos Consultoría. Solamente en coste de plantilla ese año esas 16 personas supusieron 191.000 euros y sin esas personas el evento no se habría celebrado: eran gastos necesarios", respondió el exprofesor.