A Maria Antònia Munar, la expresidenta del Consell de Mallorca, le va a costar unos 40.000 euros cerrar su primer acuerdo con la fiscalía Anticorrupción. Se trata del pacto que ha alcanzado no solo ella, sino también los 18 acusados que el lunes van a ser juzgados por una de las piezas del caso Voltor. Es un caso en el que se juzga el desvío de fondos públicos que se destinaron a la empresa pública Cilma, del Consell de Mallorca, pero que se dedicaron a la contratación de afiliados de UM que estuvieron trabajando para el partido.

La fiscalía, por este asunto, reclama para Munar una pena de ocho años de cárcel. Sostiene que fue ella quien firmó los contratos que avalaban dicha subvención. Pero una vez que la expresidenta del Consell se muestra dispuesta a indemnizar a la institución insular, pagando la responsabilidad civil, y al mismo tiempo también acepta reconocer públicamente su culpa, la fiscalía está dispuesta a solicitar una sanción mucho menor. Frente a estos ocho años de cárcel, la petición del fiscal se va a quedar reducida a nueve meses de prisión, que además se van a sustituir con el pago de una multa. Falta por concretar la cuota diaria de multa que tendrá que abonar Munar, pero se ha alcanzado un acuerdo en que esta sanción quede limitada a unos 10.000 euros.

Para demostrar el interés que tiene Munar en que se cierre este pacto, entre otras cosas porque no le va a suponer cumplir ni un solo día más de cárcel, está previsto que en las próximas horas realice el primer ingreso económico. Pagará de momento únicamente la responsabilidad civil, que en su caso se concreta en unos 30.000 euros. La multa posterior la abonará una vez que se haya dictado la sentencia.

Por tanto, el juicio que está previsto que se celebre el próximo lunes en la Audiencia va a ser un puro trámite. El pacto alcanza a todos los acusados. De hecho, varios de ellos, como por ejemplo Catalina Julve o Mateu Cañellas abandonarán el banquillo porque el fiscal tiene previsto retirar la acusación contra ellos. Este acuerdo, que es el resultado de una negociación que ha durado meses, alcanza a todos los antiguos dirigentes de Unió Mallorquina, como Miquel Nadal, Francesc Buils o Miquel Àngel Flaquer, además de Munar. Todos ellos van a pagar una indemnización económica, en función del grado de responsabilidad que tuvieron en la gestión de esta subvención pública. Algunos ya realizaron ayer el ingreso bancario y otros tienen previsto hacerlo entre mañana y el lunes, siempre y cuando sea antes del juicio.

La prioridad es pactar

El pago de esta elevada cifra económica demuestra el gran interés que tiene ahora Munar en llegar a un acuerdo, cuando no hace mucho ni siquiera se planteaba la posibilidad de negociar. En los dos juicios que ha tenido las cosas le han ido muy mal, como demuestra que ahora cumpla una condena de once años y medio de cárcel. Ya lleva casi tres años entre rejas, pero debido a que Munar aún arrastra varios procesos que todavía no han llegado a juicio, pretende alcanzar un pacto global con la fiscalía Anticorrupción. Juega a su favor que los fiscales entienden que la pena de prisión que cumple es más que suficiente, aunque se trate de casos de malversación de fondos públicos. Por ello, la fiscalía se muestra dispuesta a negociar, siempre que los acusados, sea Munar o cualquiera de sus otros antiguos colaboradores, paguen el dinero que se les exige y asuman la culpa del delitos que se les acusa. Munar lo que busca, por encima de todo, es poner una fecha a su salida de prisión. De momento ha alcanzado un primer acuerdo, pero se prevé que firme otros pactos dentro de las negociaciones que sus abogados mantienen.