El PSOE presentará una propuesta en el Parlament para instar al Gobierno central a que derogue la reforma laboral de 2012 con el fin de que se devuelva a las Comunidades Autónomas las competencias para aprobar los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) que presenten las empresas, como en el caso de Bimbo que cerrará su planta en Palma. Además, pedirá que el Govern presente este año un plan de industria balear para "dar respuesta a medio y largo plazo" a este tipo de casos, evitando la pérdida de empresas que producen en Balears, según explicó la portavoz parlamentaria socialista, Pilar Costa.

Costa admitió que evitar el cierre de empresas "no es fácil", pero consideró que la reforma laboral del Gobierno central eliminó elementos de "control y protección", entre ellos las competencias de las comunidades autónomas para autorizar los ERE que se presenten en sus territorios.

En el mismo sentido se expresó la diputada socialista Silvia Cano durante la concentración ayer a las puertas de la planta de Bimbo en Palma de los trabajadores afectados por el ERE. Cano insistió en que la proposición que presentarán los socialistas en el Parlament permitirá "dar respuesta a medio y largo plazo a casos como los de Bimbo o Coca-Cola".

Recordó que desde la reforma laboral de 2012, las empresas que quieran presentar un ERE comunican su decisión al Gobierno central, sin necesidad de una autorización previa por parte de la autoridad laboral autonómica. La diputada socialista afirmó que este procedimiento "deja a los trabajadores totalmente desprotegidos y sólo con la vía judicial como opción para reclamar".

Además, al igual que Costa, lamentó la "situación de pérdida del tejido industrial de Balears", de la que culpó a "las reformas del Gobierno de Rajoy" y a la "ausencia de políticas en materia industrial" por parte del Govern del PP en la pasada legislatura.

Así, además de instar al Govern a poner en marcha un plan industrial balear, con la participación de los agentes sociales, la iniciativa del PSOE también pedirá que el Ejecutivo balear garantice que la negociación entre las partes se desarrolle satisfactoriamente a través de contactos permanentes con las empresas y los representantes de los trabajadores.