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Entrevista

Ernest Sala: "El consumo de tabaco colapsa la sanidad pública en los meses de invierno"

El jefe de Neumología de Son Espases analiza una década de ley antitabaco

El jefe de Neumología Ernest Sala gesticula en el transcurso de la entrevista concedida a este diario en su despacho del hospital de referencia de esta Comunidad. B. Ramon

-Antes de entrar en el hospital (esta entrevista se realizó en Son Espases el pasado miércoles) me he encontrado con una enfermera fumando al lado de sus puertas. ¿Estaba infringiendo la ley antitabaco?

-Sí. Creo que la actual legislación prohíbe fumar a menos de un centenar de metros de distancia de los establecimientos sanitarios. La acción que ha visto está penada y debería ser sancionada. Además, soy de la opinión de que los profesionales sanitarios deberían dar ejemplo.

-¿Usted fuma?

-No. Y repito que me parece mal que un médico trasmita algún valor positivo del tabaco con su conducta. Creo que si fuma debería hacerlo de manera privada, nunca en público para evitar trasladar un mensaje positivo sobre el consumo de tabaco.

-El próximo día 1 de enero se cumplen diez años de la entrada en vigor de la ley antitabaco en este país. ¿Qué balance me puede hacer?

-No dispongo, porque no los he encontrado, de datos específicos de Balears, aunque sí puedo afirmar que los datos globales son positivos. La ley antitabaco ha conseguido imponer algunos aspectos positivos en la sociedad. Así, en 1997, el 33% de la población española era fumadora habitual, esto es, fumaba diariamente. Hoy en día este porcentaje se ha reducido hasta el 24%-23%, casi diez puntos menos.

-¿Tiene algún dato más actual?

-Sí. Entre 2011 y 2014 se ha reducido mucho el consumo de tabaco entre los fumadores más jóvenes, los que tienen entre 15 y 24 años, aunque más especialmente entre las mujeres en esta franja de edad. Si en 2011 fumaban habitualmente un 21% de las mujeres de estos años, en 2014 el porcentaje se redujo hasta el 15%, seis puntos menos. Entre los hombres se ha pasado de un 22,5% de consumidores en 2011 a un leve reducción del 21,5% en 2014.

-¿Tiene cifras de fumadores entre el personal sanitario?

-En los últimos diez años se ha reducido el porcentaje de fumadores entre este colectivo del 33% al 15%, quizá por el influjo de la ley antitabaco.

-¿Y qué trabajadores sanitarios son los que más fuman?

-El personal femenino en general y las enfermeras en particular, colectivo que consume tabaco en un porcentaje cercano al 40%. Por el contrario, tan solo fuma el 5% del personal vinculado a la Sociedad Española de Neumología.

-A los pocos meses de la entrada en vigor de la ley antitabaco se señaló a Balears como una de las comunidades más reacias a implantarla y más permisiva a la hora de aplicarla. ¿A qué atribuye esta circunstancia?

-No lo sé, pero puedo entender que fue debido al modelo productivo de esta comunidad, al turismo. Los propietarios de bares y restaurantes también debieron pensar que esta ley iba a reducir su capacidad de negocio.

-¿Cómo percibe la situación ahora, diez años después?

-No tengo ningún dato oficial, pero mi percepción personal me dice que la situación ha mejorado mucho. Antes había espacios para fumadores que hoy en día no existen. Creo que ahora se cumple más la normativa, al menos esa es mi sensación personal. Pienso que la gente ya tiene asumido que si quiere fumarse un cigarrillo tiene que salir del local en el que se encuentra. Soy de la opinión de que empezamos a ser una sociedad madura en este sentido. La gente ha madurado y creo que es el momento de seguir dando pasos y avanzando con esta ley."El 50% de las personas a las que se les diagnostica una enfermedad pulmonar obstructiva no deja de fumar"

-¿Que haría para mejorarla?

-En primer lugar, que se hiciera cumplir todo lo que está regulado.

-¿Prohibiría fumar en espacios públicos abiertos como los estadios de fútbol o las playas?

-Sí, lo prohibiría. Y no porque se esté dañando a los fumadores pasivos, que en estos espacios abiertos les perjudica poco el humo ajeno, sino por el ejemplo que se da. Si prohíbes fumar en espacios públicos porque está demostrado que el tabaco es nocivo para la salud, tampoco debes permitirlo en un estadio de fútbol donde los niños que acudan al partido verán que los mayores fuman con normalidad y les estarás trasmitiendo un mensaje contradictorio. Prohibir fumar en los estadios de fútbol es una medida que, a la larga, reducirá el incremento de nuevos fumadores. Y respecto a las playas diría lo mismo.

-¿Cuál es el objetivo de las leyes antitabaco?

-Mi opinión es que hay que conseguir que el consumo de tabaco se circunscriba al ámbito privado o, en todo caso, a espacios concretos para fumadores con exclusividad."Muchos adultos renuncian al hábito porque sus hijos les amenazan con dejar de hablarles si siguen haciéndolo"

-¿Qué medida adoptaría para mejorar su efectividad?

-Yo apostaría más por la educación, que es la base de todo. Hay que ir a las escuelas y enseñarles a los niños que el tabaco es una droga permitida que produce enfermedades que pueden resultar fatales. Además, si consigues trasmitir a los niños que esta conducta es dañina, puedes obtener otros beneficios.

-¿Cuáles?

-Que adultos dejen de fumar ante la reacción que provoca su hábito entre sus hijos. No es la primera vez que un paciente me dice en la consulta que ha dejado de fumar porque su hija le amenazó con dejarle de hablar si seguía haciéndolo.

-Antes se fumaba delante de los niños con total normalidad. Hoy en día esta acción está considerada casi un crimen. ¿Realmente es tan malo para el menor estar expuesto al humo del tabaco o es que ahora somos excesivamente protectores?

-Los niños, como todos los fumadores pasivos, están expuestos a un tóxico que puede provocar enfermedades. Pero el problema no es solo este. En edades tempranas los niños toman como ejemplo a sus padres. Es más probable que un hogar de fumadores haga un niño fumador, por eso hay que intentar evitar fumar delante de ellos.

-Revéleme algún aspecto negativo del consumo del tabaco que no sea tan conocido.

-Te puedo decir que el consumo del tabaco colapsa la sanidad pública en los meses de invierno. Tenemos a dos millones de personas en este país con edades comprendidas entre los 40 y los 80 años que padecen una enfermedad obstructiva crónica (EPOC) que se agrava cuando llega el frío, entre los meses de noviembre y marzo, y cuyo tratamiento requiere en muchas ocasiones un ingreso hospitalario.

-Defíname la EPOC.

-Es una limitación de la capacidad pulmonar provocada por el consumo de tabaco.

-¿Hasta qué edad pueden desarrollarse los pulmones?

-Hasta los 20 o 25 años pueden estar haciéndolo. Por eso si fumas antes de esa edad puedes estar provocando que los pulmones no se desarrollen como deben y anticipando una enfermedad obstructiva crónica.

-¿A qué edad puedes haber desarrollado una enfermedad de este tipo?

-A partir de los 40 o 45 años aunque el perfil clásico de estos pacientes nos hablaba de un varón mayor de 65 años que llevaba toda su vida fumando. Lo que pasa es que ahora hemos reducido la edad y hemos incorporado a las mujeres. El problema es que una enfermedad muy desconocida y este desconocimiento provoca un infradiagnóstico: Tan solo el 17% de la población sabe lo que es la EPOC.

-¿Cuáles son los síntomas?

-Si a partir de los 40 años tienes tos y expectoración y mucosidad abundante de forma habitual, cuando esto se convierte en una rutina, y todo esto va acompañado de cierto déficit de respiración y de pitidos en los pulmones durante los resfriados, acude a tu médico de cabecera para que te haga una espirometría que confirme o descarte la enfermedad. Se trata de una prueba muy simple que se puede realizar en los centros de salud y que permite detectar de forma muy fiable una obstrucción en los bronquios.

-Morir a consecuencia de una EPOC debe ser horrible...

-Sí, el paciente fallece por no poder respirar. La imagen del enfermo terminal es la de una persona postrada en el lecho con el respirador en la boca porque la limitación respiratoria avanza día a día.

-Una persona diagnosticada de EPOC, ¿recupera capacidad pulmonar si deja de fumar?

-No, no la recupera, pero no continúa perdiéndola. El problema es que aproximadamente el 50% de las personas a las que se les diagnostica EPOC no deja de fumar.

-¿Y qué porcentaje de fumadores acaba desarrollando esta obstrucción crónica?

-Uno de cada cuatro. Si a los 50 años no la has desarrollado difícilmente lo harás pero eso no implica que si sigues fumando acabes teniendo otras enfermedades o un cáncer de pulmón.

-¿Qué otros cáncer, aparte del de pulmón, están provocados por el consumo de tabaco?

-El de esófago, el de vejiga, el de páncreas y el cáncer de laringe o de garganta. Por no hablar de las enfermedades coronarias y episodios cerebrovasculares que provoca.

-¿Es verdad que el cáncer de pulmón apenas da síntomas hasta que es tarde?

-Sí, es silente. Más de la mitad de los casos se diagnostican en una fase muy avanzada porque en sus estadios más tempranos no suele dar síntomas.

-Bien, pero, ¿ante qué señales nos deberíamos empezar a preocupar?

-Tos persistente y no habitual, expectoración con sangre, dolor en el pecho, pérdida de peso y apetito. Y el fumador tiene entre diez y treinta veces más posibilidades de desarrollar un cáncer de pulmón que una persona que no fuma.

-¿Qué se puede hacer para diagnosticarlo en fases más tempranas?

-Desde luego, con una radiografía no lo detectas. Se está barajando la posibilidad de hacer un TAC de tórax a todas las personas en situación de riesgo como screaming para avanzar hacia una detección más precoz.

-¿Y quienes serían esas personas en situación de riesgo?

-Fumadores importantes y asintomáticos de más de cincuenta años de edad.

-¿Por qué es tan frecuente que personas que han dejado de fumar hace años acaben desarrollando un cáncer de este tipo ?

-Porque el tabaco daña los mecanismos de reparación de las células y el daño ocasionado permanece en el tiempo. Así, es sabido que un exfumador tarda diez años después de dejar el hábito en alcanzar las mismas posibilidades de desarrollar un cáncer de pulmón que una persona que no ha fumado en su vida. Un caso paradigmático de esto es el de Cruyff. Fue operado de un infarto a los 47 años y ahora, a sus 68, le han diagnosticado un cáncer de pulmón.

-Los cigarrillos electrónicos han perdido su empuje inicial pero, ¿cree que son inocuos?

-El cigarrillo electrónico ni es inocuo ni saludable y, por tanto, no es recomendable. Otra cosa es que se regulara su consumo y venta de manera que supiéramos qué elementos contiene y convertirlo en un producto sanitario para utilizarlo en los procesos de deshabituación tabáquica. De otra manera no lo recomendaría ya que puede incluso acabar incentivando el consumo de tabaco entre los más jóvenes.

-¿Y los cigarrillos que presumen de light?

-Todos los cigarrillos son igual de tóxicos y nocivos. Y esto también incluye al tabaco de liar. Mucha gente piensa que es mejor porque es más natural o contiene menos aditivos, pero está demostrado que produce más monóxido de carbono y además, por sus supuestas características más naturales, provoca que la gente no piense tanto en dejar el hábito porque piensan que fumando eso se hacen menos daño.

-La farmacología que ayuda a los fumadores a dejar de hacerlo no está cubierta por la Seguridad Social. ¿Cambiaría este hecho para conseguir tener menos fumadores?

-Por supuesto que sí. Más que nada porque se ha demostrado que sería una medida coste-efectiva. Cuesta más tratar las enfermedades que causa el tabaco.

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