Balears está en puertas de abrir la negociación del convenio colectivo de comercio, el segundo más importante tras el de hostelería. Los sindicatos pretenden que tras tres años de congelación salarial, las retribuciones de los 40.000 trabajadores afectados registren incrementos de aproximadamente un 1,1% anual, según coinciden en señalar los representantes de UGT y CCOO.
El planteamiento que hacen estas organizaciones sindicales es bien simple: 2015 ha marcado claramente un punto de inflexión y el consumo está mostrando claros síntomas de reactivación, así que ha llegado el momento de que ésta alcance también a los asalariados del sector. La pretensión también es clara: mantener todos los derechos actuales, y aceptar un convenio de larga duración (cuatro años) siempre que las retribuciones presenten incrementos superiores al 1% anual. O lo que es lo mismo, copiar la misma fórmula aplicada en hotelería y restauración, donde se firmó el pasado ejercicio un acuerdo también de cuatro años de duración con una subida salarial anual del 1,125%.
UGT y CCOO acordaron recientemente denunciar antes de que concluya este año el convenio en vigor, que se había prorrogado durante 2015 y que ha contemplado una congelación en las retribuciones durante los últimos tres ejercicios. De esta forma, se espera que la composición de la mesa y el inicio de los contactos con las patronales se inicien durante el mes de enero. Hay que tener en cuenta que el convenio actual concluye su vigencia el 31 de marzo de 2016, por lo que se espera contar con uno nuevo para el 1 de abril.
Hay un punto que marcará las negociaciones que se van a iniciar en cuestión de pocas semanas: las patronales ya han anunciado que están dispuestas a asumir mejoras salariales que se muevan entre el 1% y el 1,5% anual, pero a cambio de unas condiciones que los sindicatos califican de "inasumibles": reducir sustancialmente la compensación económica que actualmente se paga en el sector por trabajar en festivo, de 13,77 euros la hora.
Las patronales Afedeco y Pimeco esgrimen que las grandes superficies y las cadenas con convenio de empresa no están pagando esas cantidades, lo que dificulta al pequeño y mediano comercio poder competir en igualdad de condiciones. Así, hay que recordar que existe un convenio de grandes superficies al que están vinculados El Corte Inglés, C&A, Carrefour o Alcampo, a los que se suman los propios de Mercadona, Eroski o Dia, y en breve Lidl contará con su propio acuerdo.
Según las patronales isleñas, es necesario mejorar el servicio que se presta al cliente, de ahí que cada vez resulte más necesario abrir en festivo, especialmente en zonas con mayor afluencia de turistas, por lo que resulta imprescindible abaratar los costes que esta estrategia conlleva.
Sin embargo, los sindicatos se oponen radicalmente a renunciar a esa compensación económica, y se advierte de que "los derechos adquiridos se van a defender con unas y dientes".
En este sentido, se recuerda que han sido las patronales isleñas las que han ido asumiendo la apertura durante un número creciente de días festivos, con una elevada concentración en el mes de diciembre, lo que supone un elevado sacrificio para la vida familiar de los asalariados que en opinión de CCOO y UGT merece ser compensado económicamente.
