Los diputados de Balears ya no podrán cobrar un sueldo del Parlament y, al mismo tiempo, mantener una actividad privada. A partir del 1 de enero deberán escoger entre tener la dedicación exclusiva como actividad única o cobrar dietas por asistencia. La iniciativa de Podemos fue apoyada por PSOE y Més en la mesa del Parlament y se elimina la posibilidad de dedicación plena, donde además de cobrar un sueldo de la cámara existía la posibilidad de desarrollar una actividad profesional.
El PP, El Pi y Ciudadanos se mostraron del todo contrarios a esta iniciativa. Según los grupos de la oposición, se está "acotando la posibilidad de entrar en política a funcionarios, que pueden volver a su plaza, o a gente sin trabajo que escogerá la dedicación exclusiva". La oposición se queja de que comerciantes, abogados o médicos, entre otros, deberán cerrar sus despachos o comercios si quieren ser diputados o solo percibir los 22.000 euros de las dietas de un diputado raso.
Sin embargo, la portavoz de Podemos, Laura Camargo, detalló los motivos de la medida: "En los tiempos que estamos no es de recibo que haya políticos cobrando dos sueldos y gente viviendo con 300 euros al mes".
La nueva forma de retribuciones de los Parlamentarios consiste en que los que cobren la denominada "dieta globalizada" por ejercer otra actividad, percibirán entre 22.309 euros al año, si se es diputado raso, hasta 36.000 euros si se desempeñan otras funciones como portavoz de un grupo parlamentario. Por su parte, los diputados que tengan dedicación exclusiva y solo trabajen en el Parlament percibirán la misma cantidad que antes, 57.000 euros al año.
El PP acusó a Podemos de "beneficiar a la diputada Camargo". También presentaron una alternativa, pero según la presidenta del Parlament, Xelo Huertas, "llegó muy tarde".
